Recientemente, el gobierno de la provincia de Gansu, en Lanzhou, al noroeste de China, dio a conocer que más de seis mil personas dieron positivo a brucelosis. Sí, señalaron que esto se debió a un brote provocado por la fuga de una bacteria en una planta de vacunas hace más de un año.
¿Qué es lo que pasa en China?
De acuerdo con información de Global Times, las autoridades de Lanzhou indicaron en conferencia de prensa que el gobierno realizó pruebas a 55 mil 725 personas en toda esta ciudad, de las cuales seis mil 620 dieron positivo a brucelosis.
Incluso, indicaron que esta nueva cifra de casos positivos representó una mayor cantidad con respecto a los tres mil 245 contagios de brucelosis que se registraron hasta el 14 de septiembre de este año.
En aquella ocasión, después de una investigación, las autoridades sanitarias chinas señalaron que el brote se había originado en una fábrica biofarmacéutica propiedad de la empresa China Animal Husbandry Insdustry Co. Además, informaron que se debió a que ésta utilizó desinfectantes vencidos para desarrollar vacunas contra la brucelosis, dejando la bacteria en su gas residual.
Luego, detallaron, el gas residual contaminado formó aerosoles que el viento transportó hasta el Instituto de Investigación Veterinaria de Lanzhou, donde finalmente se dio el brote por primera vez en noviembre del año pasado. Finalmente, el laboratorio donde se producían las vacunas contra la brucelosis se cerró en diciembre de 2019 y se desmanteló en octubre.
¿Qué es la brucelosis?
La brucelosis no es una enfermedad desconocida, como el COVID-19; aunque lo que sí sigue siendo un problema con esta bacteria, es que es altamente contagiosa al ser transmitida por animales.
Sí, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las personas pueden contraer esta infección por medio del contacto directo con animales infectados, al comer productos de origen animal crudos o igualmente contagiados, o al inhalar la bacteria en el aire.
Las personas que pueden estar más expuestas a la brucelosis, son aquellas que trabajan en granjas o veterinarias, con lo cual mantienen contacto directo con animales. Por otra parte, los síntomas son semejantes a los de la gripe, como fiebre, dolor de cabeza y disminución del apetito.
El tiempo de incubación es de cinco a 60 días. Eso sí, el diagnóstico es algo difícil porque la mayoría de casos son subclínicos; es decir, con síntomas muy leves. La manera de tratarse esta enfermedad es con la combinación de diferentes antibióticos.
*Con información de DW