Lo que nos faltaba, primero la pandemia por COVID-19, la influencia y ahora, un nuevo brote de peste porcina africana se ha expandido a lo largo del continente asiático. China reportó 70 lechones portadores del virus, mientras que Corea del Sur, lamentablemente, se vio obligado a sacrificar hasta 1,500 cerditos, para frenar al virus, antes de que se propague por todas las granjas del país. Un minuto de silencio para ellos.
Antes de que se empiecen a alarmar, cabe aclarar que la peste porcina africana, altamente contagiosa específicamente entre cerdos y jabalíes. No hay pruebas científicas que demuestren su transmisión a humanos, aunque los científicos sí recomiendan dejar de consumir la carne de animales sospechosos de padecer la enfermedad. El único afectado, es el bolsillo, ya que estos brotes han provocado que se disparen los precios de la carne de este animal, una de las más consumidas en todo el mundo.
En el país liderado por Moon Jae-in, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Asuntos Rurales anunció que el pasado 8 de octubre del 2020, se encontraron tres cerdos muertos que dieron positivo a la enfermedad una granja de la provincia de Gangwon, pero como medida de prevención, las autoridades sanitarias decidieron sacrificar a todos los puerquitos que se encontraban a 10 kilómetros a la redonda, terminando con un baño de sangre.
De acuerdo con ‘El Confidencial’, hasta esta semana no se habían registrado nuevos casos de peste porcina desde octubre del 2019, pero se descubrieron 750 casos en jabalíes que vagan por la frontera con Corea del Norte. Desde septiembre, China, Corea del Sur y Japón prohibieron las importaciones de carne de cerdo de Alemania, después de que se confirmara de un caso de peste porcina de un jabalí en el este del país.
¿Por qué es importante?
El virus de la de peste porcina africana, es de alto nivel de contagio. Los agricultores temen que la epidemia pueda convertirse en pandemia rápidamente, por lo tanto, es obligatorio tomar medida cautelares lo más rápido posible. En años anteriores, la enfermedad se ha extendido por el sudeste asiático, partes de Europa y también se ha encontrado en África y en América.
Alemania, se ha convertido en un país clave en la exportación de carne de cerdo, Estados Unidos, Brasil y Canadá, se suman a los países que aportan millones de dólares en la importación de ganado porcino. Así es que imaginen, con un solo animal infectado que se exporte a otro país, podría colapsar al mundo entero.
Tal como ha pasado en México, de hecho, en febrero del 2020, la gran labor del Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica, fue reconocida por la Administración Danesa de Veterinaria y Alimentos, por sus métodos de inspección no intrusivos en puertos, aeropuertos y fronteras, logrando contener el contagio de de peste porcina africana desde septiembre del 2019, lo que significa salvar la vida de decenas de millones de cerdos mexicanos, así como el bolsillo tanto de los productores porcinos mexicanos como de sus consumidores.