La Auditoría Superior de la Federación (ASF), órgano encargado de la fiscalización de la Cuenta Pública, presentó ayer en el Palacio Legislativo de San Lázaro un informe en el que revela las irregularidades de todas las entidades del país y sus dependencias durante 2015. De acuerdo con su investigación, se detectaron posibles daños al erario por aproximadamente 165 mil millones de pesos en el gasto del gobierno federal, los estados y municipios.
Del ejercicio no salieron bien librados el Gobierno Federal, poderes de la Unión y órganos autónomos, quienes mostraron irregularidades por 100 mil millones, mientras que los estados y municipios salieron al quite con 65 millones de pesos respectivamente. En este apartado se puede enlistar algunas observaciones que el órgano realizó sobre las administraciones de algunos personajes políticos que tienen la mira puesta en las elecciones de 2016. Entre los salpicados se encuentran Miguel Ángel Osorio Chong, Luis Videgaray, Graco Ramírez, Rafael Moreno Valle, Miguel Ángel Mancera y José Antonio Meade.
Al presidenciable titular de la Segob (aunque él insista en negar sus aspiraciones presidenciales) se le cuestionó en el informe que el combate a la trata de personas sea insuficiente, que su dependencia no lograra expedir con éxito una cédula de identidad y que el fallido plan antidelictivo PRONAPRED presentó deficiencias. A Moreno Valle le señalaron que destinó una millonada a obras que no están en funcionamiento, en total abandono y otras que no se terminaron de hacer, además de irregularidades en los recursos ejercidos de los programas para agua potable, alcantarillado, saneamiento para zonas urbanas, tratamiento de aguas residuales y del Fondo Metropolitano.
A José Antonio Meade, actual titular de la Secretaría de Hacienda, la Auditoría Superior le hizo observaciones de su desempeño al frente de la Secretaría de Relaciones Exteriores y la Secretaría de Desarrollo Social: durante su gestión no se logró modernizar el mecanismo para la expedición de pasaportes, tarea para la cual se contrataron a cinco empresas (por un monto de mil 444 millones 919 mil 776 pesos). Al frente de la Sedesol se recrimina la presunta simulación de servicios y la contratación de terceros sin capacidad técnica, material ni humana para prestar los servicios requeridos.
La Cámara de Diputados tampoco quedó bien parada, ya que de acuerdo con el análisis, ejerció recursos públicos sin racionalidad y sin comprobar que los mismos fueran destinados a trabajos legislativos. Los diputados recibieron un presupuesto de 7 mil 812 millones de pesos en 2015, de los cuales mil 742 millones corresponden a recursos ejercidos en subvenciones extraordinarias y otros conceptos poco transparentes. “En términos generales, la Cámara de Diputados no cumplió con las disposiciones legales y normativas aplicables en la materia”, afirmó la Auditoría.
La Auditoría Superior de la Federación también dio a conocer que encontró irregularidades en el cumplimiento de contratos asignados por Pemex a la empresa brasileña Odebrecht en las refinerías de Tula y Salamanca. En Tula, denuncia la ASF, hubo un pago injustificado de mil 200 millones de pesos, además de que la compañía utilizó subcontratistas que incumplieron. En la refinería de Salamanca encontraron otras irregularidades, ahora por 822 mil dólares, destinadas a pagarle al personal supuestamente contratado por Odebrecht.
¿Qué es la Cuenta Pública?
De acuerdo con el sitio de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, la Cuenta Pública es el informe que integra la esta dependencia y que presenta a la Cámara de Diputados para su revisión y fiscalización. Este documento contiene “la información contable, presupuestaria, programática y complementaria” de los tres Poderes de la Unión, los órganos autónomos y de cada ente público del sector paraestatal.