Un nuevo ataque químico en Siria se reportó el sábado 7 de abril, el cual se dice dejó cerca de 70 personas muertas, sin embargo algunas organizaciones afirman que la cifra supera los 150.
La Asociación Médica Sirio-Americana (Sams) dijo que poco antes de las 8 de la noche (hora local) del sábado, decenas de personas fueron llevadas de emergencia a las clínicas en la ciudad de Duma, todas ellas con dificultades para respirar, problemas cardíacos, quemaduras en las corneas y algunos echaban espuma por la boca. Estos síntomas provocados por la inhalación de un gas nervioso. Cerca de 500 personas han sido atendidas y varias han fallecido.
Los Cascos Blancos y otros grupos vinculados a la oposición al régimen aseguran que el sábado por la noche un helicóptero del gobierno Sirio arrojó un barril explosivo que contenía gas sarín, que puede resultar letal, y gas de cloro, un químico altamente tóxico. Por su parte el Gobierno sirio considera que las acusaciones no son más que un montaje de los “terroristas”, quienes sólo buscan detener el avance del Ejército sirio sobre Duma, lugar desde donde el ejercito rebelde suele disparar contra la capital.
Estos ataque vienen luego de que fracasaran las negociaciones para poner paz en la ciudad entre el Ejército del Islam y Rusia. La Organización para la Prohibición de las Armas Químicas, vinculada a la ONU, está investigando todo este asunto: “Estas informaciones, si se confirman, son espeluznantes y demandan una respuesta inmediata por parte de la comunidad internacional”, dijo la portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Heather Nauert, afirmando que es uno de los peores ataques en la historia y quien le pide a Moscú poner fin a su apoyo al régimen del presidente sirio Bachar al Asad. “Rusia ha incumplido sus compromisos con la ONU y ha traicionado la Convención sobre Armas Químicas”, advirtió la portavoz estadounidense.
Claro que Donald Trump no se iba a quedar callado y a través de una serie de tuits culpó al Ejercito Sirio, al presidente de Rusia, Vladimir Putin, y a Irán por “apoyar al animal de Bachar el Asad”. Bueno, hasta a Barack Obama. El mandatario estadounidense aseguró que “Siria pagará un alto precio” por este ataque.
Con información de: El País.