¿Recuerdan las terribles imágenes del presunto ataque químico que se suscitó en Siria? Pues bueno, la ONU dijo que quería investigar, ante esto el presidente de Siria Bashar al Assad dijo que no había ningún problema en ello. Así que la ONU mandó a investigadores para determinar si sí se había utilizado un agente tóxico en el ataque. Pues bueno, todo parecía bien, hasta que cinco coches del convoy de la ONU, el cual era escoltado por los servicios de seguridad sirios, fue blanco de francotiradores.
Según el diario francés Le Monde, los investigadores pudieron salir ilesos del ataque y se dirigieron a un puesto de control del gobierno de Al-Assad.
El País informa que la caravana se dirigía al suburbio de Ghuta (a 10 kilómetros de Damasco), lugar en el cual, aseguran los opositores al régimen de al Assad, más de 1 400 civiles perdieron la vida el miércoles pasado tras un supuesto ataque con armas químicas ejecutado por las tropas del presidente Bashar al Assad.
El ataque se produjo en una zona que está entre los territorios controlados por el régimen sirio y los que controlan los rebeldes. La televisión pública de Damasco ha responsabilizado del ataque a los opositores al régimen, aunque nadie está seguro si esta versión es verdad.
Horas antes, tras dejar el hotel Four Seasons de Damasco, donde se alojan los investigadores, dos bombas de mortero han caído en la zona.
(Aquí está el convoy antes del ataque)
Pero los investigadores de la ONU no se las tienen que arreglar nada más contra las intimidaciones (provengan de donde provengan) sino que, además, deben de sortear contratiempos peores para su investigación, como el tiempo que se han retrasado y los bombardeos constantes, los cuales, probablemente, ya han borrado cualquier rastro de gas tóxico.
Según al Jazeera, el convoy logró llegar a a Moudamiya y visitó dos hospitales para tomar muestras y entrevistar a las víctimas. Los investigadores están ahí para determinar si se utilizaron agentes tóxicos y no para ver quién los utilizó.
La Jornada dice que la oposición a al Assad asegura que las milicias fieles al gobierno fueron las responsables del ataque, afirman que abrieron fuego desde un aeropuerto militar.
Un revolucionario que esperaba a la entrada de Moadhamiyad al Sham (al suroeste de Damasco) la llegada de los inspectores, expresó:
«Querían evitar que los inspectores llegaran a nosotros»
En una entrevista a un diario ruso (país que vende armas al régimen de Al Assad) el presidente de Siria expuso:
«Las acusaciones de los países occidentales son un insulto al sentido común»
«Los Estados Unidos fracasarán como han fracasado en todas las guerras que han comenzado en los últimos años, empezando por Vietnam»
El ministro de Exteriores, Walid al Muallem, reiteró la versión del gobierno sirio de que fueron los opositores los que lanzaron el ataque con armas químicas, expresó:
«Vamos a demostrar que esas acusaciones de los terroristas son falsas»
Damasco sostiene que han hecho lo posible por garantizar la seguridad de los inspectores, también afirmaron que dieron un alto al fuego en las zonas en las que se va a investigar. Por otro lado, el Ejército Libre de Siria (o como también son llamados, los opositores al régimen de al Assad o simplemente «los rebeldes») expresó que ellos también protegerían al personal de la ONU en caso de que fuera necesario (pero si ambas parte dicen que los van a proteger ¿entonces, quién los atacó?).
La ONG Médicos Sin Fronteras ha dicho el sábado que en los tres hospitales con los que colabora en Damasco, ha habido 3 600 casos de pacientes con síntomas neurotóxicos, además de que reporta la muerte de 355 personas, a pesar de que la organización no tiene personal propio en esta zona, insiste en la confianza que le ofrecen sus fuentes en el país.
Obama y el primer ministro inglés David Cameron se han reunido y convinieron en que se había acabado el tiempo de al Assad para despejar dudas sobre el ataque químico.
(Aquí están ambos señores, que, a pesar de que sobre sus respectivos gobiernos pesan acusaciones muy fuertes por espiar tanto a sus ciudadanos como a los demás países, decidieron reunirse para ver qué hacer en el caso de Sira :S )
Al respecto el ministro de Información sirio, Omram Zoabi, dijo que cualquier acción militar occidental no sería «un día de campo», sino una guerra «muy grave, una bola de fuego que inflamará Oriente Medio».
Por otro lado, el ministro de exteriores ruso, Sergei Lavrov, dijo que Occidente no tenía ninguna prueba para respaldar las afirmaciones que acusan al régimen sirio de utilizar armas químicas, advirtió:
«El uso de la fuerza sin la aprobación del Consejo de Seguridad de la ONU es una gran violación al derecho internacional»
Como vemos, el problema sirio cada vez crece más y tiene tintes de convertirse en un verdadero problema internacional (recordemos el apoyo que le da EUA a la oposición siria, y el respaldo que le da Rusia al régimen de al Assad).
Para saber más sobre el ataque del miércoles, pueden ver nuestra entrada Esto pasa en Siria, el peor ataque con armas químicas en el mundo desde hace 25 años.