Hoy, en “Mundo Enfermo y Triste”… Esta noticia bien podría haber ocurrido esta madrugada en México, ya que muchos fervorosos creyentes de la virgencita (quién sabe por qué) encuentran una estrecha relación entre lanzar estruendosos cohetes con su adoración por María de Guadalupe… pero, no. Esta triste historia ocurrió en Colombia.
Según reporta Milenio, a los paisanos de Gabriel García Márquez también les encanta eso de andarse lastimando los tímpanos con explosiones de pólvora (pues total, como su oído no es tan sensible como el de algunos nobles animales, qué más les da), y fue tanto el estruendo que provocaron con los fuegos artificiales, que un perro que se encontraba en el onceavo piso de un edificio, acorralado por la desesperación, se arrojó al vacío.
Por pirotecnia, perro se lanza desde el onceavo piso de un edificio en #Colombia https://t.co/mh7BTm0usN pic.twitter.com/XDPSUX29QX
— Milenio.com (@Milenio) 12 de diciembre de 2017
De acuerdo con la información recogida por medios locales, Sultán (nombre del perrito) vivía en un edificio ubicado en la ciudad de Armenia, Colombia, y su caída no sólo provocó su muerte, sino también lesiones en una mujer, ya que al aventarse por la ventana cayó con todo su peso sobre una mujer que se encontraba en una de las áreas comunes del inmueble. Afortunadamente la dama sólo tuvo una lesión en el hombro y ya se recupera en su hogar.
Y bueno, aquí en México no se reportó ningún perro suicida (aún)… pero sí han ocurrido otro tipo d desgracias:
¡AYÚDENME A ENCONTRAR A JACOB! Amigos mi perro se escapó de mi casa muy asustado por los cohetes y el ruido por la final. Se perdió en la Colonia Villas de Oriente y la última vez que lo vieron fue por la empresa Kemet. Si lo ven PORFAVOR llamen al 8120731458 o 8120694018 pic.twitter.com/D59NOK5N8m
— Rodolfo Galván (@Rodolfogga7) 11 de diciembre de 2017
Los últimos minutos de Sultán no fueron de lo más placenteros: según Luisa Fernanda Salazar, propietaria de la mascota, previo a arrojarse por la ventana el perro tiró platos e hizo diversos daños en la cocina del departamento. “Debió sentir un miedo muy grande”, lamenta la mujer. Los cohetes que provocaron el pánico en el animal no fueron detonados por alguna fiesta en especial… nomás porque son tradicionales en esta época decembrina, explicó la dueña de Sultán.