Ygnacio López Mendoza, alcalde de Santa Ana Maya (Michoacán), hizo un ayuno por 18 días en reclamo de recursos para poder cumplir sus labores de gobierno.
Según Reforma, en octubre el alcalde hizo dicha huelga, después la dejó ya que le dijeron que le darían el dinero. Pero la falta de recursos no era el único problema que amenazaba al alcalde, también el crimen organizado.
Ygnacio López Mendoza era amenazado (como toda la población de su localidad) por el crimen organizado. Los Caballeros Templarios le pedían una cuota mensual del presupuesto público.
El mismo alcalde dijo:
«Por obra le tenemos que darle a los Templarios el 10 porciento. Las constructoras ya saben y se ponen de acuerdo con nosotros para ver quién les da el dinero, si nosotros o ellos»
Pues bueno, el día de ayer fueron encontrados sus restos en su camioneta con huellas de golpes en el rostro. Al principio, las autoridades michoacanas supusieron un accidente automovilístico, pero, según familiares y colegas políticos, fue una ejecución.
La Asociación de Autoridades Locales de México (AALMAC) anunció el día de ayer que el alcalde fue sacado de su casa a la fuerza por un grupo de personas la noche del miércoles.
La organización expresó:
«Esta lamentable muerte no corresponde a un accidente»
La diputada federal del PRD, Aleida Alavez Ruíz, pidió el día de ayer en el Congreso guardar un minuto de silencio en memoria del alcalde.
***Vía Reforma
