A todos nos cayó de extraño cuando nos enteramos que había pronóstico de lluvia, viento fuerte y chubascos, este domingo 22 de mayo en CDMX… básicamente porque el sol estaba a todo lo que da. Pero conforme pasaron las horas nos dimos cuenta de que era de verdad y una pareja lo supo cuando casi les cae un árbol encima.
Una pareja se salvó de que les cayera un árbol por los fuertes vientos
Sucedió en la Colonia Juárez, justo en la calle Lisboa esquina con Roma. En un video compartido en redes sociales se observa cómo la pareja caminaba tranquilamente poquito después de las 3 de la tarde… sí, justo cuando los vientos comenzaron con todo en el centro del país.
Pero de pronto, y luego de bajarse a caminar sobre la carretera, la pareja se tomó de la mano para echarse a correr repentinamente. Segundos después, y apenas detrás de ellos, el enorme árbol cayó e impactó varios autos que estaban estacionados.
Medios como Reforma enviaron de volada a sus corresponsales para transmitir cómo los servicios de emergencia atendían el asunto. También la cuenta del C5 de CDMX informó sobre la caída del árbol y señaló que el personal correspondiente ya andaba por allá.
Los servicios de emergencia atendieron el asunto porque varios autos terminaron debajo
Ahora bien, más allá de lo impresionante del video del momento en que el árbol cae, hay otra situación que sin duda merece ser reportada. Como te decía, Reforma publicó videos y fotos del incidente, y en uno de ellos cuentan que la dueña del auto afectado prácticamente tuvo que pagar para ser auxiliada.
¿Cómo así? Bueno, según el testimonio, la mujer tuvo que darle dinero a los bomberos de CDMX para que pudieran comprar gasolina y hacer uso de sus motosierras. Un vecino de la zona fue quien reportó lo anterior.
Dicha denuncia no ha sido ni confirmada ni desmentida al menos en las cuentas oficiales de los Bomberos de CDMX, de hecho, se nota que tuvieron mucha chamba este mismo día pues otro enorme árbol cayó en Xochimilco a causa de las rachas de viento.
En fin, qué bueno que todo quedó nomás en el susto.
