Como ayer les informamos, el pasado 31 de diciembre un grupo de ladrones entró a una tienda de Apple en París, logrando llevarse más de un millón de euros (algo así como 1.3 millones de dólares) en productos.
Sin embargo, esto no es algo nuevo, pues durante los últimos años se han reportado varios atracos a los establecimientos de Apple, así como un incremento en los robos de dispositivos de la manzana.
Y es que apenas en noviembre, la empresa de Cupertino sufrió un robo de 3,600 unidades del iPad mini en el aeropuerto John F. Kennedy (Nueva York), lo que supuso una pérdida de 1.5 millones de dólares. Este mismo año, en septiembre, unos no muy astutos ladrones irrumpieron en la tienda Apple de Temecula, California al chocar un auto BMW y posteriormente ser arrestados.
Ya antes se habían reportado otros atracos en tiendas de Salt Lake City y San Diego, siendo ésta ciudad en donde se produjo, en 2011, un robo que terminó con varios heridos y uno de los criminales muerto. Asimismo, en 2009 se registró un espectacular asalto en Nueva Jersey en donde se llevaron más de 70 aparatos en poco más de 30 segundos.
Pero la “atracción” por los productos de la manzana mordida va más allá de sus establecimientos, pues hace unos días el mismo alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, aseguró que el robo de dispositivos Apple incrementó en 3,890 casos, siendo el iPhone el objetivo preferido de los ladrones. Más dramático aún es saber que, si se descarta la cifra de los robos relacionados a Apple, la ciudad hubiese tenido un descenso en su tasa de crimen.
Sin duda, la gran demanda de productos Apple y su alto precio, son los principales estímulos para los criminales, quienes parecen haber puesto el ojo en los dispositivos del gigante de Cupertino. Y no sólo en Nueva York y París, pues aquí en México también ya sabemos como se las gastan.