Este jueves compareció ante el pleno del Senado de la República el titular de la Secretaría de Economía (SE), Ildefonso Guajardo. Los senadores de oposición en algún momento lo cuestionaron sobre algunos de los aumentos más importantes  a productos y servicios durante la administración del presidente Enrique Peña Nieto, para ser específicos el senador panista Víctor Fuentes Solís le preguntó sobre el gasolinazo.

¿La respuesta? “Que los pobres no comen gasolina, sino pollo, huevos y tortillas“. Y no, no es broma.

El secretario defendió el actual sexenio comparando los aumentos que hubieron con los presidentes anteriores. Afirmó que en la administración de Felipe Calderón el pollo subió 58%, mientras que en este sexenio sólo subió el 19.9%. En el caso de la tortilla, en el sexenio anterior subió 66.2% mientras que ahora solo aumentó un 17%.

Explicó que el huevo es un caso aparte porque hubo una época en la que el precio se fue al doble por la gripe aviar, pero que lo están entregado en el nivel en que lo recibieron.

Ya entrados en acusaciones, Guajardo explicó que cuando el PAN estuvo al frente del país “quiso conducirlo con los mismos instrumentos de un partido hegemónico” y que las consecuencias de eso fue que los “poderes fácticos se treparon encima” y tomaron en cuenta a los monopolios y no el interés de la gente.

Le agregó que durante sexenio pasado México cayó al lugar 66 en materia de competitividad, mientras que en esta administración el país se recuperó y ascendió al lugar 51.

Algo así como:

Además, destacó los beneficios que llegarán a México con la renegociación del acuerdo comercial entre México, Estados Unidos y Canadá especialmente en sectores como la competitividad, la industria automotriz, laboral, ambiental, manufacturas y ambiental.

Recordó que por primera vez, en el tratado se contemplan temas como los derechos laborales, derechos ambientales y un capítulo anticorrupción.

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