El 2 de febrero ya pasó desde hace rato, pero ayer en Palacio Nacional se armó la tamaliza para AMLO y los empresarios más poderosos del país quienes, además de chocolate en jarro, recibieron en sus mesas una carta compromiso, para señalar con cuántos boletos ayudarán para la rifa del avión presidencial… o mejor dicho, para la rifa.
En una imagen difundida en diversos medios, se puede ver la carta compromiso que habrán de regresar los empresarios para indicar al presidente con cuánto ayudan a la causa. Son cuatro opciones las que tienen para escoger: 20, 50, 100 o 200 millones de pesos.
“Por medio de la presente manifiesto mi compromiso para participar de manera voluntaria en la compra de billetes de la Lotería Nacional, con motivo del sorteo conmemorativo que la misma llevará a cabo en relación con el Avión Presidencial, en beneficio de la asistencia pública, hospitales y adquisición de equipo médico”, indica la carta que recibió cada uno de los empresarios que acudió ayer por la noche a Palacio Nacional.
“Aquí no hay presiones de nada, el que guste, el que no qué bueno, échense su tamalito y su atole”, señaló el presidente durante el convivio.
Aunque se indicó que los empresarios tienen hasta julio para avisar con cuánto van a cooperar, desde ayer varios dejaron su carta compromiso marcada y firmada. Para darle un toque más “acá”, la carta fue depositada en una tómbola de la Lotería Nacional que se colocó en un punto de Palacio Nacional.
De acuerdo con La Jornada, al evento anunciado hace unos días por el propio presidente acudieron cerca de 200 empresarios… número que superó las expectativas, ya que se esperaban que nomás fueran 100. Entre los asistentes se pudo ver a Carlos Slim, Emilio Azcárraga (Televisa), Alejandro Ramírez (Cinépolis), Carlos Peralta (IUSA) y Carlos Bremen (Grupo Financiero Value).
Aunque uno como mortal podría ver muy manchado eso de comprometerse con tantos millones de pesos a cambio de simples cachitos de la Lotería Nacional, según testimonios de empresarios hay voluntad de ayudar a la causa.
“No les puedo adelantar, pero creo que se alcanzaron los objetivos y el propósito es muy noble y muy bueno”, comentó Miguel Rincón de Biopappel, quien se llevó la carta compromiso a casa. “Nadie está obligado a aportar porque ya pagan sus impuestos, es voluntario”, remarcó el presidente.