Continúa la desbandada en el PRD. No sólo personajes “X” cuyos nombres resultan desconocidos para el respetable. Ahora, se les fue una legendaria y fundadora del partido: Amalia García.
Dejando atrás 29 años de militancia en el PRD, Amalia García renunció al partido. En general, porque acusa que los intereses que sigue ahora el Sol Azteca son de carácter “personal” y nada tienen que ver con aquellos con los que se fundó: “lamentablemente los objetivos y valores que le dieron autoridad y cohesión al PRD, se han desdibujado”.
La renuncia fue informada al presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PRD, Manuel Granados, por medio de un comunicado en el que, además, se critica que la dirigencia del Sol Azteca dejó de tomar en cuenta a militantes como Porfirio Muñoz Ledo, Cuauhtémoc Cárdenas y Pablo Gómez. Personajes que, pese a ser fundadores del partido y “figuras emblemáticas de la intelectualidad democrática (…) se han separado decepcionados o han sido echados a un lado”.
¿Y nomás por eso dejó al partido al que perteneció por casi tres décadas? Bueno, aunque todos estos meses no dijo nada, ahora (cof, a una semana de la elección presidencial, cof) muy oportunamente critica la idea de pretender formar un gobierno de coalición con un partido como el PAN… y, sobre todo, con un abanderado como Ricardo Anaya. “El mismo Ricardo Anaya que presidía la Mesa Directiva de la LXII Legislatura de la Cámara de Diputados los aciagos días de diciembre de 2013, durante los cuales, violando el Reglamento interior de dicho poder (…) se convirtió en pieza clave en la aprobación de la reforma energética que llevó a su privatización”, acusa Amalia García.
Para la ahora experredista, la reforma energética puso fin a acciones estratégicas del gobierno mexicano en el tema hidrocarburos, en beneficio de particulares: se les otorgó a estos “lo que antes era considerado como un recurso para proteger la seguridad y la soberanía de la Nación”… y, pese a que esta iniciativa (enviada por el mismísimo EPN) entregó recursos del pueblo a capital privado, en el PAN de Ricardo Anaya aseguraron que su aprobación era ”un triunfo moral”.
En fin, la referencia a la reforma energética sólo fue para ejemplificar por qué para Amalia García resulta “inadmisible que se propongan [en el PRD] constituir un gobierno con quien fue partícipe relevante en ese golpe a nuestro país, y que su participación no haya sido parte del análisis en el momento de la decisión sobre la candidatura a la presidencia de la República”.
La renuncia de Amalia García no generó respuestas al interior del PRD. Para el momento en que fue dada a conocer, los del Sol Azteca estaban más entretenidos en el cierre de campaña en la CDMX de Ricardo Anaya. La ahora experredista no detalló si se adherirá a algun movimiento (o campaña presidencial). Sólo se limitó a señalar que “en estos tiempos se requiere que se abra un rumbo progresista para el país”.
