Este 29 de septiembre es el Día Internacional de Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos. Es por eso que la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) publicó algunos datos que resultan bastante alarmantes.
Desde 2014 en todo el mundo ha aumentado de manera paulatina el número de personas afectadas por el hambre y cada día se desperdician toneladas de alimentos comestibles.
Desperdicio de alimentos en todo el mundo
Resulta que en todo el mundo de todos los alimentos que se producen, cerca del 14% se pierden entre la cosecha y la venta minorista.
Pero no es todo, cerca del 17% de la producción total de alimentos se desperdicia. De ese total el 11% es en los hogares, el 5% en los servicios de comidas y el 2% en el comercio al por menor.
Cuando un alimento se pierde o se desperdicia también implica que todos los recursos que se utilizaron para su producción, como agua, tierra, energía y mano de obra también se desaprovechan.
Eso sin contar que la eliminación de los alimentos perdidos o desperdiciados en basureros genera emisiones de gases de efecto invernadero, lo que además contribuye al cambio climático.
Es por eso que es necesario adoptar medidas a escala mundial y local para aprovechar al máximo los alimentos que producimos, nuevas formas de trabajar y buenas prácticas para gestionar la calidad de los alimentos y reducir las pérdidas.
¿Cuál es el mensaje principal de estos datos? No hay cabida para el desperdicio de alimentos. Solo para que nos demos una idea, todos los años en América Latina y el Caribe se pierden 220 millones de toneladas de alimentos. Un informe de 2017 del Banco Mundial revela que los mexicanos desperdiciamos 20.4 millones de toneladas de alimentos básicos, lo que es más o menos una tercera parte de lo que se produce.
El primer paso para ayudar a disminuir la #PérdidayDesperdicio de alimentos es la concientización 💡♻️🍎🥦
¡Infórmate y haz del #NoDesperdicio tu forma de vida!
Lee la columna de opinión de @danigodoygabler y @sgranadoso
👉 https://t.co/mxOiggp0lB pic.twitter.com/GbH5JzfwpS— FAO Américas (@FAOAmericas) September 29, 2021
¿Qué podemos hacer?
Aunque parezca que no tirar la comida en nuestras casas no contribuye al desperdicio mundial de los alimentos, la realidad es que si todos ponemos un granito de arena el problema es mucho menor.
Por ejemplo, cuando vayas de compras por la despensa de la semana o del mes, solo compra lo que estás seguro que te vas a comer. No compres de mas si sabes que terminará echándose a perder.
Trata, en la medida de lo posible, aprovechar toda la comida. Muchas veces hacemos un guisado, por ejemplo, el lunes y si sobra lo confinamos en un tupper al fondo del refri hasta que sale echado a perder. Si te sobra comida trata de acabártela o compártela.
De igual forma, la separación de desechos es sumamente importante. Enviar los alimentos que pueden comportarse al basurero es sumamente dañino, en vez de eso acumúlalos en algún bote y haz composta. Puede hacerse en una caja pequeña, no se necesita mucho espacio.
Eso, a su vez, te ayudará a iniciar con un huerto urbano, por ejemplo.
