Hay veces que no sabemos para qué la gente abre la boca, éste es uno de esos.
Por si no fuera lamentable el que se realice un juicio por la violación de una niña de 13 años, un juez de la ciudad de Tel Aviv, comentó lo siguiente:
“Algunas chicas disfrutan siendo violadas”.
Obviamente lo dicho por el también magistrado en retiro, Nissim Yeshaya, causó la indignación de todos los presentes en la audiencia en la que se discute si el ataque sexual que sufrió la menor -de ahora 19 años- a manos de cuatro jóvenes palestinos debía considerarse como un acto terrorista y qué indemnización por parte del Estado debería recibir la víctima.
De acuerdo con un abogado presente en la escena, cuando Yeshaya profirió tamaña sandez, “Hasta los miembros del jurado se quedaron callados varios minutos. Ni siquiera él sabía lo que había dicho. No entendió por qué todo el mundo se quedó callado de repente”.
Obviamente al ver que sus declaraciones no lo hicieron muy popular, el hombre que sirvió como magistrado en la Corte del Distrito de Tel Aviv de 1993 a 2009 ofreció disculpas mediante un comunicado, en el que aseguró que sus palabras habían sido malinterpretadas:
“Están intentando lograr publicidad a mi costa. No creo que las víctimas de violación no sientan dolor ni que la violación no sea una grave ofensa. Mis comentarios se malinterpretaron”.
Por su parte la presidenta de la comisión parlamentaria para el Estatus de la Mujer, Aliza Laví, pidió el cese inmediato de Yeshaya, quien desde hace cuatro años se encuentra retirado, pero actúa como presidente de tribunales administrativos y rectores.
Para que vean que en todas partes hay personaje como éste.
