La oposición y Morena se portaron a la altura de las expectativas (porque nunca se espera nada bueno de ellos). Mientras que los diputados resolvieron rápido el trámite, en el Senado la hicieron cansada, pero al final de cuentas Alejandro Armenta quedó como nuevo presidente de la Mesa Directiva.
La tercera fue la vencida. Al tercer intento, los legisladores dejaron las actitudes pueriles y decidieron, por mayoría de votos, dejar al morenista en el cargo para la LXV Legislatura (la número 65, en caso de que no sepan que “Rocky tres palitos” es Rocky tres).
Para que Alejandro Armenta llegara a tal instancia así estuvo el viacrucis: primero, le ganó la votación interna en Morena a Higinio Martínez que, luego de quedarse sin candidatura para el Edomex, pues ahora sí que quedó como el perro de las dos tortas (y eso que es cercano a AMLO).
Y luego vino lo bueno: tras ganar la votación entre morenistas, Armenta ya era presidente del Senado… pues ya por defaul, ya que Morena es mayoría en el Senado. Y ahí fue donde la oposición se mostró negativa y, para sorpresa de nadie, avisaron que de plano no apoyarían la propuesta.
La votación preliminar se tuvo que repetir, ya que 10 de los senadores no marcaron bien su boleta. Morena y los servicios parlamentarios señalaron (con base en el artículo 93 del Reglamento) que esos votos en blanco, al tratarse de planillas, se cuentan como asistencias y votos a favor… peeeeeero la oposición tenía ganas de hacerla de emoción…
Después, cuando parecía que iba la buena, no se alcanzaron los votos necesarios (se quedó a un pin$%&/e voto) y, ni modo, a la otra.
Pero bueno, a final de cuentas ocurrió lo esperado: Alejandro Armenta se quedó como presidente del Senado, luego de obtener apenas 65 votos a favor de 122 posibles.
Como dato curioso de esta votación, Ricardo Monreal, quien desde hace rato está muy piropeado por la oposición y por morenistas “peluseados” por la cúpula cercana a AMLO se quedó a poco de alcanzar a Armenta.
De acuerdo con la reportera Leticia Robles de la Rosa, Monreal – quien ni siquiera participó en la elección – se quedó con 52 de los votos. Algunos de los senadores tachonearon el nombre de Alejandro Armenta y escribían el nombre del aspirante a la candidatura presidencial de Morena.
Alejandro Armenta, como muchos de Morena, viene de las filas del PRI. Como parte del tricolor fue presidente municipal de Acatzingo, Puebla, además de legislador local y federal. Ahhh y también secretario de Desarrollo Social, en épocas del gober precioso, Mario Marín.
En 2017, hace no mucho, fue suspendido del PRI, luego de asistir a un evento en contra de la corrupción organizado por Morena. Armenta aprovechó y renunció, para irse mejor con la 4T. Y así es como ahora lo tenemos de presidente del Senado.
Por cierto, es uno de los cercanos a Ricardo Monreal. De ahí que hasta senadores de Morena votaron en contra de su designación.
