Hay gente a la que de plano no se le da el carisma. Más o menos del tipo de banda que se queda sola en las esquinas de las fiestas y que terminan reunidos con otras personas que también son infelices para formar clubs de odio social y porno raro. De vez en vez, sin embargo, algunos de esos seres dice “Hey, este no es mi destino… ¡lograré ser amado por todos!”. Alcalde de Urupan crea manual para que le echen porras
Bueno, Aldo Macías Alejandres, alcalde de Uruapan, Michoacán, se ha sumado a la lista de los que se niegan a ser los apestados de la fiestas y, aprovechando que, bueno… es el presidente municipal y puede hacer lo que quiera, pues no se aguantó las ganas de hacer un manual para que la banda le eche porras en los eventos sociales. Sí, leíste bien. El manual lleva por nombre “matracas y cartulinas” y será aplicado durante la ceremonia de conmemoración de “Los mártires de Uruapan”.
A través de sus secretarios de Desarrollo Económico y Jurídico y del tesorero municipal, Aldo Macías Alejandre planea lograr lo imposible: que la gente lo trate como alguien cool o mejor, como un buen político.
En efecto, son esos los funcionarios públicos responsables de repartir las matracas y colocar las cartulinas con las porras para que la gente se lo pase bien chido coreando al presidente. O, al menos, eso es lo que él pretende. La bella ironía del destino provocó que la ceremonia esté planeada para llevarse a cabo en la Casa de la Cultura municipal.
En el documento pueden leerse las porras sugeridas:
1- “Aldo, amigo, el pueblo está contigo”.
2- “Aldo, hermano, contigo siempre estamos”.
3- “Señor presidente, aquí está su gente…”.
El documento también establece que serán usadas 500 matracas y 500 cartulinas que serán entregadas a los líderes. Si crees que luego se las podrán llevar a su casa para echarle porras a quien quieran, te equivocas. Más tarde, tendrán que devolverlos, según queda establecido en el documento.
Aldo Macías Alejandres pertenece a ese grupo de políticos que piensan que, en Michoacán, la popularidad política se sigue sosteniendo con espectáculos. Tiene mucho que aprender de su propia gente.
