Muchos quisieran vivir en Estados Unidos, realizar el sueño americano, que hoy vale mucho más. Y es que, el creador de los crujientes y exquisitos dulces Jelly Belly y fundador de ‘Jelly Belly Candy Company’, David Klein, está a punto de retirarse y en lugar de vender la compañía, prefirió lanzar un concurso al estilo Willy Wonka, lanzando 50 tickets dorados, en busca de los nuevos dueños de la fábrica de dulces.
Además, esta campaña también puede ser tomada como una forma de resarcir la insensatez de agregar sabores como calcetines apestosos, huevo crudo, vómito o pañales, en las líneas de dulces ‘Jelly Beans’ y ‘Jelly Beans Bean Boozled’, que a más de una persona en el mundo, le ha tocado comer.
Aunque la mecánica es exclusiva para Estados Unidos, el concurso ha despertado la envidia del mundo, ¡quién no quisiera participar en la búsqueda de los billetes dorados! La idea es imitar lo más parecido posible al sorteo de de ‘Charlie y la Fábrica de Chocolates’, sin embrargo, Klein logró darle un twist a la mecánica del sorteo.
La firma abrió una página web donde los interesados podrán inscribirse para comenzar la búsqueda del tesoro. ‘Candy Man’, ha comenzado a recorrer lo largo y ancho de Estados Unidos escondiendo un boleto en cada estado del país vecino del norte. Los interesados, tendrán que pagar casi 50 dólares para obtener una pista de donde puede estar el ‘premio mayor’, disfrazado en un collar de dulces con una etiqueta que incluye un código que se debe escanear para verificar su hallazgo.
“El objetivo del concurso ‘The Gold Ticket Treasure Hunt’, es hacer que la gente salga con sus familias, que incluso la abuela o el abuelo puedan unirse con los niños y nietos para salir a buscar el ticket dorado’, menciona Klein en el portal. Sin duda uno de los concursos que hacen falta en México, sería muy interesante, si una compañía se animara a activar a sus consumidores para que salgan a caminar o correr en familia, con un fin específico.
Los ganadores de la primera fase, recibirán cinco mil dólares, en caso de que no se encuentren los 50 boletos dorados, Jelly Belly seleccionará a un grupo de personas para participar en la última búsqueda del tesoro para ganar la fábrica de dulces Jelly Belly ubicada en el estado de Florida, así como un curso de elaboración de dulces de la marca con sede en la Universidad de Wisconsin, con todos los viáticos pagados.
Lejos de Willy Wonka
A pesar de que algunos estadounidenses se han molestado, ya que el famoso Willy Wonka, no cobró ni un centavo por participar en el concurso. Pero, Kñein explicó al ABC, que fijó el costo de las entradas al concurso con lo necesario para recuperar los viáticos de recorrer los 50 estados. Sin embargo, también recalcó que el portal de Jelly Belly, ha tenido un tráfico web sin precedentes.
Cuando Roald Dahl dio vida a Willy Wonka en sus libros ‘Charlie y la Fábrica de Chocolates’ y ‘Charlie y el Gran Ascensor de Cristal’, nunca imaginó que inspiraría grandes películas como la de Manuel Stuart en 1971, interpretado por Gene Wilder, la de Tim Burton en 2005, protagonizada por Johnny Deep, ni mucho menos para marcar una parte de la historia de una fábrica de dulces como Jelly Belly.
