Se armó un desbarajuste en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM). Si de por sí la terminar aérea es una pachanga en cualquier momento, la noche del domingo 24 de julio y las primeras horas del lunes 25 de julio fueron un verdadero caos. Las filas, los reclamos y los retrasos se pusieron tremendos.
¿La causa? La versión oficial habla de un bache en una de las pistas.
Las redes sociales —especialmente Twitter, que casi no se presta a descargar bilis— estuvieron repletas de denuncias por los retrasos en el AICM.
Leíamos de algunos vuelos cancelados, personas que estuvieron atoradas en la terminal, vuelos que estuvieron dando vueltas a la Ciudad de México y de plano, algunos otros menos afortunados, fueron los pasajeros que tuvieron que pasar horas completamente detenidos porque nomás no había espacio.
La mera verdad se ve que estuvo de la patada.
El bache en la pista del AICM
La versión oficial del flamante AICM controlado por la Secretaría de Marina es que se trató de un sorpresivo bache en la pista 05R/23L que hizo que cerraran las operaciones a las 6 de la tarde y nomás dejó una sola vía libre para todo el changarro. Avisaron que se trataba de una zona crítica para las operaciones.
“La abundante cantidad de lluvias en esta temporada y el constante aterrizaje de aviones provoca el desprendimiento de gravilla en la zona de toque de las aeronaves sobre la pista. Al tratarse de un área crítica requiere su inmediata reparación, para lo cual se tiene que cerrar la pista por seguridad.”
—@AICM_mx
La cosa es que la reparación se tardó la vida.
A través de su cuenta de Twitter, el AICM avisó que pudieron arreglar el bache hasta las 4 de la mañana, debido a que las intensas lluvias les complicaron la maniobra.
Oficialmente se vieron afectados 35 vuelos —7 llegadas y 28 salidas—, además de 3 vuelos que fueron cancelados. “Los demás llevaron a cabo sus itinerarios con demora”, explicó el Aeropuerto chilango después de una noche de ojeras, reclamos y nos imaginamos, mucho trabajo.
¿Último dato curioso de este asunto en el AICM? Resulta que AMLO estuvo entre los pasajeros afectados por el mentado bache. Cuando venía regresando de su tradicional fin de semana en Nayarit —absténganse de hacer chistes— le tocó fletarse los retrasos. El piloto de su vuelo dijo que había un cráter, a lo que el presidente respondió “una cosa es un bache, un socavón y otra un cráter”. Ya ven, puro diálogo importante.