Seguramente han leído en las noticias mundiales que las tensiones entre Israel y Palestina están regresando a niveles peligrosos, que se han llevado a cabo nuevos bombardeos en Gaza o simplemente, que las relaciones en esa histórica zona de conflicto se están volviendo a poner de la patada.
Pero se han preguntado, ¿por qué son diferentes si lo comparamos con otras veces que se han desatado los conflictos ahí?
La respuesta —como todo lo que sucede en Israel, Gaza y Palestina— es un poco enredada, pero ahora hay razones políticas, electorales e incluso internacionales detrás de estos bombardeos que, en tan solo tres días, han dejado a más de 44 personas fallecidas, entre ellos, 15 menores de edad.
Todo empezó con un arresto
Después de los conflictos en mayo de 2021 parecía que las relaciones entre Israel y Palestina en Gaza habían llegado a un punto de relativa calma. Sin embargo, estamos viendo que se trata de un nuevo brote de violencia que comenzó con un arresto.
Fue el pasado 1º de agosto cuando Israel arrestó a Bassem al-Saadi.
Al-Saadi es uno de los líderes de la Yihad Islámica Palestina (YID) una organización que rechaza la existencia de Israel y busca la creación de un Estado Islámico en la región. Los acusan de recibir dinero de Irán para fortalecer su operación. Algunos países de occidente —Estados Unidos, pues— la consideran una organización terrorista.
¿Lo importante? En la operación para arrestar a Bassem al-Saadi, las fuerzas militares de Israel bombardearon un campamento en la ciudad de Yenín y mataron a un adolescente de 17 años.
Ese movimiento, incluida la muerte de personas inocentes, provocó el aumento en las tensiones y en las protestas en Palestina. Incluso la ONU visitó el lugar y pidió —palabras más o palabras menos— bajarle dos rayitas al conflicto. “No hay ninguna justificación para la muerte de civiles”, escribieron en un breve llamado a la paz.
Operación עלות השחר (Amanecer)
Ahí fue cuando Israel lanzó lo que se ha conocido como Operación Amanecer.
De acuerdo con el primer ministro israelí, Yair Lapid, había una amenaza “inminente” de que los grupos relacionados con la Yihad Islámica Palestina (YIP) reaccionaran ante el arresto de su líder. Entonces, Israel decidió “atacar primero”, por decirlo de alguna manera, con un ataque sorpresa que duraría una semana.
Uno de los principales movimientos fue matar a Tayssir al-Jabari, considerado uno de los comandantes del YID.
¿El problema? Las fuerzas de Israel bombardearon el edificio de Gaza en donde se encontraba al-Jabari sin considerar que también había civiles. En el ataque murieron 10 personas —una niña de 5 años, el caso más famoso— y dejaron cerca de 60 heridos.
La Operación Amanecer ha continuado durante prácticamente una semana. Israel frenó la entrada de combustible a Gaza y se han reportado más bombardeos en otros lugares de Palestina, que Israel consideraba zonas controladas por el YID. En los ataques han muerto al menos 44 civiles.
Por su parte, el YID ha respondido con algunos bombardeos que han prendido las alarmas en Jerusalén.
De acuerdo con las fuerzas oficiales de Israel, el 97% de los misiles han sido interceptados por su sistema de defensa y el resto cayeron en zonas no pobladas.
Alto al fuego
Mientras lees esta nota, ya se aprobó un alto al fuego entre Israel y Palestina, negociado por Egipto. Se reabrió la frontera y regresó el paso del combustible, pero las cosas siguen sin estar muy calmadas —menos después de 8 días de violencia.
Israel asegura que su misión fue un éxito.
En unas declaraciones recientes, dijeron que la Operación Amanecer logró con su objetivo de destruir 170 espacios esenciales del YID, incluyendo bodegas de armas. También celebraron la muerte de los líderes del movimiento considerado terrorista. Sobre las muertes civiles dijeron que una tercera parte eran “esposas de los comandantes de este grupo del terror”.
“Otros 15 civiles fueron asesinados por el fuego del YID”, aseguró Israel.
Las autoridades de Salud en Gaza y Palestina mencionan que las víctimas son culpa de los militares en Israel. Oficialmente han marcado 44 personas fallecidas y 15 de ellos eran niños o menores de edad. En una breve declaración señalaron a la “agresión israelí” de los más de 300 personas heridas.
La cosa es que la tensión en Israel y Gaza podría ser síntoma de un problema grave que se avecina.
En menos de tres meses, Israel tendrá elecciones generales y el primer ministro al frente del país, Yair Lapid, se estará jugando el puesto. Analistas de la Associated Press (AP) consideraron que esta Operación Amanecer podría ser el inicio de una estrategia del gobierno actual para frenar los avances del YID y mantener al otro grupo en la zona, Hamas, controlado. Al mismo tiempo que para los votantes israelís se muestra como un líder intransigente.
A ver qué sucede.
