Pues ya parece que es concurso de a ver en qué estado aparecen más personas muertas… y quién sabe qué se lleve el ganador. El caso es que ahora fue en Puebla el lugar en el que se dio un lamentable hallazgo: doce cuerpos depositados en tambos metálicos. Sí, “nada más” una docena de cuerpos sin vida, además de tenis, calcetines con sangre y un poco de combustible.
Lo anterior, con más precisión, fue ubicado en campos de cultivo del municipio de San Andrés Calpan. Sin, embargo, según información proporcionada por la fuente ministerial que abrió ya la averiguación previa, aún no han sido identificadas las víctimas, por lo que están en calidad de desconocidas.
No obstante, se ha señalado que las víctimas podrían tratarse de personas que fueron “levantadas” en un palenque realizado de manera clandestina en Cuautlancingo. Respecto a esto, las autoridades no dicen nada… pero deberían, ya que el incidente no fue nada desapercibido: en el lugar donde se llevaron a cabo las peleas de gallo, mero frente a la presidencia municipal, primero hubo una balacera (nomás dos personas murieron), después, 20 de los presentes fueron privados de su libertad… Uno de los plagiados puede tratarse del empresario gallero Lauro Luna, quien estuvo en el palenque del municipio de Cuautlancingo, el martes.
Para que las autoridades se animen a confirmar que los restos de los tambos corresponden con los “levantados” del palenque, todavía falto un rato, ya que además de que no se ha identificado nada, la causa de la muerte de las personas tampoco se ha podido determinar: la necropsia todavía no se ha llevado a cabo.
Lo que se sabe hasta ahora es que los elementos de la policía municipal dieron con los tambos debido a una llamada anónima. Cerca de las 4 de la tarde de ayer, fue la hora en la que los agentes se dirigieron a los predios ubicados en el paraje Yepazotla.
Esperemos que no porque ya se produzcan menos tambos con petróleo, ahora se incremente el número de estos.
