Por no saberse la coreografía de “YMCA”, no llevar mallitas bien justitas, no saberse ni una de ABBA o Juanga, ni tener un perrito chihuahua… es decir, no presentarse a sus oficinas como Adrián Uribe cuando se hace el “gracioso” personificando a un gay, las autoridades de Austria le rebotaron su solicitud de asilo a un chico afgano de la comunidad LGBT.
Por ridículo que parezca, los austriacos hubieran aceptado al susodicho si hubiera demostrado ser más gay… pero su “manera de caminar, su actitud y su forma de vestir” no dejaron ver “que pueda ser homosexual”, justificó la oficina migratoria de Viena… esto para no ser acusados de que la negativa de asilo hubiera tenido que ver con la procedencia del solicitante. Nada de discriminación contra la gente de Afganistán.
Austria niega el asilo a un afgano de 18 años porque “no parece suficientemente gay” https://t.co/g08VwmZ2RC
— Juan Carlos Mora (@juancmorav) 16 de agosto de 2018
“Al no serlo, usted no tiene nada que temer si regresa a Afganistán”, informó la oficina austriaca al chico de 18 años quien había alegado que su preferencia sexual es considerada un crimen grave en su país de origen, por lo cual incluso su vida está en peligro.
A los del país europeo les hace falta ver más box… o conocer las desventuras de Fabiruchis, ya que otro de los argumentos para rechazar la petición del jovenzuelo fue el hecho que éste ha participado en peleas con otros chicos. Según la revista Falter, los funcionarios señalaron que la conducta violenta del solicitante, además de evidenciar su potencial agresivo, no es algo que se espere de un homosexual.
¡¡¿¿What??!! Es como decir que a un muy “macho” no le pueden gustar los gimoteos de Sam Smith o no puede conmoverse con las rancheras de poder de Chente Fernández. Pffff…
¿Más elementos del ridículo dictamen de las autoridades de Austria? Ahhh pues señalaron que el chico de Afganistán tiene muy pocos amigos y le gusta salir en grupos pequeños, algo inaceptable para alguien que se precie de cobijarse bajo la bandera del arcoíris: “los homosexuales son más bien gregarios”. Gregarios: dícese de aquellos que, como los animalitos que andan por la naturaleza, vive en manadas o rebaño. Claro, como las manadas de gays.
¿Más? El joven narró a las autoridades que tuvo conciencia de su sexualidad desde los 12 años. “¿No fue muy pronto?”, cuestionó el responsable de los servicios de migración en Wiener Neustadt, en la baja Austria, dándole a entender que era poco probable que fuera un gay, gay… pero de verás gay, como los que reciben en Austria.
El ministro del Interior de Austria, Herbert Kickl, del Partido de la Libertad de Austria (de extrema derecha… ahhhhh), se negó a comentar sobre este curioso pero indignante caso. Sin embargo, tan pronto se enteró, aseguró que no refleja la realidad del país, donde cerca de 120 mil pedidos de asilo han sido aprobados en los últimos años. Y, además, pidió a la prensa checar a los gays que hay en sus tierras, pa’ que vean el nivel… Nah, esto último no es cierto, pero ya nomás faltaba…