La creatividad humana no tiene límites… y más cuando de fregar al prójimo se trata. ¿No lo creen? Chequen cómo se las ingeniaron algunas personas para dar el tiro de gracia con mucho estilo.
A continuación les presentamos una pequeña probadita de la imaginación destructiva que el hombre ha demostrado a lo largo de la historia de las armas de fuego y de aparatos de espionaje. Un Top 10 de las extravagancias inventadas en los siglos XIX y XX… bueno, también algunas de años atrás.
Acoustic Kitty. En la lengua de Cervantes, el Gatito Acústico fue un operativo de la CIA con el que se pretendía interceptar comunicaciones potencialmente peligrosas, esto durante la Guerra Fría. Mediante una cirugía, se le implantaba a los mininos un dispositivo que servía para captar y transmitir vía radio. Pequeño detalle, por el cual no fructificó este invento: los gatos no obedecían a dónde tenían que ir.
Pistola Linterna. No tan extravagante, pero sí letal. Esta linterna LED era ocupada por los servicios secretos de Corea del Norte.
Pistola labial. Ideal para la femme fatale: esta arma conocida como “el beso de la muerte”, era una pequeña pistola calibre 4.5mm y era utilizada por las mujeres de la KGB, quienes tenían que ser muy precisas, ya que sólo tenían un tiro.
Palomas y gatos cohete. Esta pachecada data de manuscritos de artillería de 1530. Al parecer el objetivo de estas letales armas era incendiar castillos y fortalezas mediante el lanzamiento de gatos y palomas equipadas con cohetes.
Perro antitanque. Lo manchado de las proporciones entre el animalito y el armatoste, no fue impedimento para que las fuerzas soviéticas, iraquíes y hasta las norteamericanas utilizaran a un perro a modo de kamikaze: sólo entrenaban al canino para buscar comida debajo de los tanques, los dejaban unos días sin comer, les ponían un dispositivo explosivo y… bueno, ya imaginarán.
Vespa 150 TAP. El sueño de todo hipster amante de las armas. Esta Vespa fue producida en los años 50’s para las tropas francesas. Sólo se le “añadía” un cañón M20 a la popular motito y lista para atacar.
Pistola harmónica. Además de servir para dar el tiro de gracia, en caso de que la víctima quisiera una última canción, también servía… nah, la verdad es que esta creación de J. Jarre sólo tuvo su nombre debido a la curiosa forma de su cargador, el cual estaba dispuesto en forma lineal… no obstante lo rápido en que se podía cargar, nunca fue producida en serie, debido a que no era muy práctica para ser transportada.
Bomba de murciélagos. Cuando hacen falta explosivos, siempre está la naturaleza a la mano… y si los juntan, “mejor”. Este artefacto fue producido a finales de la II Guerra Mundial por los EEUU: sólo se metía un puñado de murciélagos “equipados” con explosivos incendiarios en una bomba, cuando ésta llegaba a 1000 metros de altura, se liberaba a los quirópteros, se activaban los dispositivos, dando como resultado una buena cantidad de incendios en la ciudad atacada.
Anillo pistola. Uno de los revólveres más pequeños en la historia, este coquetón artefacto no era tan efectivo; de hecho, los expertos aseguran que la explosión del diminuto calibre .5mm causaba más daño a la sensual asesina que al enemigo.
Paraguas búlgaro. El favorito del Pingüino. Usado por la KGB y –como su nombre lo dice- el servicio búlgaro.
