Ayer el gobierno de Estados Unidos dio a conocer que durante varios meses y de forma secreta realizó una acusación contra Eugenio Hernández Flores, ex gobernador de Tamaulipas, esto tras descubrir que el funcionario estatal (2005-2010) realizó diferentes transferencias y depósitos con recursos ilícitos con sumas que ascienden a los 30 millones de dólares.
En la acusación realizada en una cortes de los Estados Unidos, también está involucrado el cuñado de Hernández Flores, Óscar Gómez Guerra, quien fuera indiciado por los mismos delitos apenas el año pasado.
No es la primera vez que el ex mandatario tamaulipeco tiene problemas con la justicia. Durante la administración de Felipe Calderón fue investigado por supuestos vínculos con el cártel de Los Zetas, sin embargo la Procuraduría General de la República (PGR) no logró realizar cargos en su contra.
No obstante, entre 2012 y 2013 la Siedo emitió una orden para su localización, esto por sospecharse su colaboración con integrantes del cártel del Golfo y Los Zetas en actividades de lavado de dinero. A final de cuentas, en julio de 2013, la PGR cerró indagatorias, porque las imputaciones –realizadas por testigos protegidos- no pudieron sostenerse.
Difundida por el periódico San Antonio News, se establece que el gobierno norteamericano busca el decomiso de tres propiedades del ex gobernador ubicadas en la ciudad de McAllen y otra en Austin, esta última con valor de 2.3 millones de dólares. En caso de ser encontrados culpables, Hernández Flores y su cuñado podrían pasar hasta 20 años en prisión… esto sólo por el delito de lavado de dinero, ya que habría que agregar cinco más por la utilización de recursos ilícitos para hacer negocios.
Hasta el momento el gobierno de México no ha recibido solicitud alguna por parte de los Estados Unidos para realizar la detención provisional del ex gober tamaulipeco.
Al respecto Eugenio Hernández restó importancia a los cargos, asegurando que todo su patrimonio fue amasado de forma legal. Supuestamente en su momento lo demostró a las autoridades de nuestro país… ahora lo volverá a hacer con las norteamericanas:
“La acusación es una réplica de la acusación que le hicieron a mi cuñado Óscar Gómez Guerra el año pasado, en donde no le dieron ni la oportunidad de dar información, lo sorprendieron, él tiene operaciones comerciales que ha realizados en el país, y tiene todas sus declaraciones del SAT, tiene sus ingresos justificados, y ya el mismo aclaró que yo no tenía absolutamente nada que ver en sus operaciones”, aseguró al diario Reforma.
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