¿Qué dijeron?, “¡hasta que se me va a hacer conocer a esa nena fuera de las rejas!” No (todavía). La ex dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) aún tiene que sortear otros dos procesos… así que seguirá guardadita por las autoridades.
Mientras las autoridades andan bien ocupadas buscando a Javier Duarte y también en eso de echar todo el peso de la ley sobre el ex gobernador Guillermo Padrés, han aflojado un poco en algunos asuntos que hace algunos años eran ejemplo de su implacable aplicación de la justicia.Por ejemplo, la ya olvidada ex dirigente sindical, Elba Esther Gordillo, a quien ya le aflojaron un poco el grillete con la noticia de la exculpación de una de las dos imputaciones que enfrenta por el delito de defraudación fiscal.
La feliz nueva fue emitida por un juez federal, quien ordenó su inmediata libertad… nomás en papel, porque la sexy profesora seguirá bajo custodia de la Procuraduría, toda vez que tiene abiertos dos procesos penales por los delitos de evasión fiscal, lavado de dinero y delincuencia organizada.
“No es justo que mujer tan bella y frágil sufra el encierro”, pensarán muchos de los lujuriosos fans de la Gordillo. Pero, para calmarles un poco la pena, tienen que saber que la ex sindicalista no se encuentra en prisión, sino en el interior de un hospital privado, donde se le atiende de los muchos achaques que sufre.
El abogado de Gordillo, Marco Antonio del Toro Carazo, explicó que la resolución del juez se dio debido a que se encontraron ilícitas las pruebas que había recabado la PGR, las cuales sirvieron para construir toda la acusación penal en contra de la ex del SNTE. Además, señaló que el pasado 26 de octubre se le concedió a su cliente un amparo por las violaciones que las autoridades han hecho en contra de sus derechos humanos, ya que no le dieron chance de tener una defensa adecuada y por ocultarle una averiguación previa que se le realizaba por el delito de defraudación fiscal.
