Ahora sí, es momento de rendir homenaje a don Gabilondo Soler. Sí como bien cantaba Cri-Cri, a partir del 1° de enero del 2020, todos andaremos como ‘La Patita’, con canasta y reboso de bolita, para ir al mercado a comprar todas las cosas del mandado. Y es que, entra en vigor la nueva ley contra las bolsas de plástico de un solo uso, por lo que ni tiendas, ni comercios y ni siquiera los supermercados o tiendas departamentales, podrán donar, venderlas, regalarlas o canjearlas a cambio de una compra.
Como seguramente recordarán, en mayo del 2019, el Congreso de la Ciudad de México aprobó el dictamen de la Ley de Residuos Sólidos, que prohíbe la distribución y venta de bolsas de plástico, cubiertos y platos desechables, globos, entre otras cosas para disminuir el impacto que tienen en el medio ambiente.
Hasta ahora, algunos tenderos y negocios locales se habían unido a la iniciativa de forma voluntaria, mientras que algunos supermercados, presumían que las bolsas que otorgaban eran reciclables. Pero a partir del próximo miércoles, como dicen vulgarmente, aquí o todos rabudos o todos parejos.
Para lograrlo, el gobierno de la ciudad, en conjunto con la Secretaría del Medio Ambiente han dialogado con la mayoría de las plazas comerciales y principales supermercados para buscar alguna alternativa para empacar los productos sin que afecte a la clientela. De acuerdo con Entrepeneur, La secretaria también señaló que están abiertos a buscar alternativas para brindar a los consumidores otros tipos de plástico que sustituyan a las bolsas típicas.
De ahí que, como seguramente has podido apreciar, aunque la mayoría de los supermercados tienen la advertencia en el área de cajas, lo muestran de forma reservada, al grado que bien puede pasar desapercibido, pues lo mantienen en letras chiquitas.
Lo mejor, es que todos saldremos beneficiados, pues las bolsas de plástico son un de los principales problemas de contaminación en la capital; pueden llegar a tardar hasta 10 o más años en degradarse; así es que poniéndole un alto a la circulación, distribución y deshecho de estos productos, le hacemos un gran favor al planeta y a las próximas generaciones.
Los únicos que han pegado el grito en el cielo con esta iniciativa, es la Asociación de Industriales de la Bolsa Plástica de México, pues reclaman con justa razón que de prohibirse el uso de plásticos en cualquiera de sus variantes, más de 38 mil personas dedicadas al giro, estarían en peligro de perder sus empleos.
Pero mientras que son peras o son manzanas, no te vayan a tomar desprevenido, lo mejor será que en tu próxima visita al supermercado, lleves tus bolsas de tela.