Hace unos momentos el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación propuso rechazar las pruebas que presentó el Movimiento Progresista para anular la elección presidencial, la cual dictaría como ganador al candidato del PRI-PVEM, Enrique Peña Nieto.
Es el momento decisivo para las elecciones del 2012 y la sentencia del TEPJF definirá los próximos 6 años de nuestro país. Aún en estos momentos se discute la resolución del Tribunal pero la sentencia parece definida ante la falta de “pruebas sólidas”.
Pero ¿qué ha pasado en el país desde las elecciones presidenciales?
Aquí les presentamos un time line con lo más relevante:
El primero de julio
Mientras los votantes entraban y salían de las casillas con su dedo pintado, el ambiente, acompañado con denuncias y rivalidades, se hacía cada vez más tenso por la espera de los resultados. A unas horas antes de que siquiera empezara el PREP, los medios ya estaban anunciando sus propias estimaciones, colocando a Peña Nieto en la cabeza con una abrumadora ventaja sobre los demás candidatos.
Después de momentos de suspenso, el PREP comenzó su conteo y todo indicaba que los medios no estaban tan equivocados: en ningún momento Peña Nieto dejó de tener la ventaja. Se asumieron los resultados largo rato antes de la finalización del conteo del PREP, pues la candidata del PAN, Josefina Vázquez Mota y Gabriel Quadri del PANAL reconocieron su derrota apenas empezaron a darse los resultados preliminares.
Mientras se destapaban botellas de champaña, Calderón felicitaba al ganador y se cantaba en la sede del PRI por la inminente victoria de su candidato, Enrique Peña Nieto; el movimiento estudiantil #YoSoy132 y el candidato del Movimiento Progresista, Andrés Manuel López Obrador comenzaron a poner pruebas en la mesa y acusar las elecciones del 2012 como sucias y anulables.
Crisis postelectoral
El segundo día de julio, el IFE dio a conocer los resultados del PREP, colocando a Peña Nieto del PRI como el ganador de las elecciones por la presidencia.
Con todas las irregularidades presentadas ante el TRIFE, los simpatizantes de Obrador, panistas e integrantes del movimiento #YoSoy132 salieron a las calles para exigir que se resolvieran las miles y miles de denuncias que se dieron el día anterior en contra del PRI, acusando al viejo partido de haber comprado los votos de la gente para obtener la victoria de su candidato. Los estudiantes, a lado de todos los demás ciudadanos inconformes con los resultados de las elecciones “sucias” que “imponen” a un joven candidato del partido más viejo del país –un partido que, después de 70 años en el poder, tiene las manos sucias de corrupción–, se manifestaron por todo el país para pedir justicia.
Nuevamente, como ocurrió hace seis años, el país se fracturó…
Pero los manifestantes que se oponen a la victoria de Peña Nieto no fueron los únicos en quejarse de las chuecas acciones del PRI. El tres de julio los “simpatizantes” del PRI acusaron de fraudulentos al partido ganador por haber comprado sus votos a cambio de los monederos electrónicos de Soriana. El escándalo se debió a que dichas tarjetas no las reconocieron las tiendas de la cadena.
Las marchas de los ciudadanos en contra de la oposición no han cesado desde que el IFE anunció los resultados preliminares en los primeros días de julio, y aunque algunos ya se hartaron de la resistencia, siguen saliendo a la luz las pruebas que deberían invalidar estas elecciones.
Cinco millones de votos fueron comprados, según las pruebas que posee Andrés Manuel López Obrador. Esta cifra podría cambiar fácilmente los resultados del pasado primero de julio y así, el 12 de julio, Obrador presentó un juicio –el cual ocurre mientras usted lee estas líneas– para invalidar los comicios.
¿Y luego?
El Movimiento Progresista ha dedicado los últimos dos meses a buscar y presentar pruebas para demostrar que las elecciones se deben anular y hoy, jueves 30 de agosto –a casi dos meses del primero de julio–, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación se reunió para definir si dichas pruebas son suficientes para dar el fallo en contra de Enrique Peña Nieto.
Pero, fuera de que las elecciones sean fraudulentas o no, o si Peña Nieto será nuestro próximo presidente… La cuestión radica en la decisión del Tribunal. Durante más de dos meses, han salido a la luz pruebas que manchan el nombre de Peña Nieto y dan suficientes razones para declarar la invalidez de los comicios. Compra de votos por allá, lavado de dinero por acá y rebase del tope de presupuesto de campaña por otro lado.
¿Nos vamos echar a otro presidente de dudosa legitimidad en el poder durante los próximos seis años, de la misma manera que ocurrió este sexenio?