¿Quién no tiene un amigo pachanguero que no teme beber entre semana? Ese que está orgulloso de ser el ‘Todas Puedo’ y que es inmune a la cruda al día siguiente, anda con una chela de nuevo en el desayuno y te da miedo contestar sus mensajes a media semana por el nivel de fiesta que se carga (después de los 30, nada es lo mismo).
El baterista Keith Moon de The Who era todo eso y más. Vivir en el exceso y siempre al límite era parte de su rutina, podía hacer lo que quisiera, era un rockstar sin conocer límites. Los punks le temían y pocas veces pensaba si era una locura cada cosa que hacía. Lo irreal era normal para él, le gustaba explotar dinamita en hoteles, disfrazarse de cualquier personaje y chocar autos.
Hoy recordamos al ‘rey de las fiestas’ y uno de los mejores bateristas em la historia del Rock & Roll.
Moon ‘El Lunático’
Cuando The Who hizo su debut en la televisión en EE.UU. (Smothers Brothers Comedy Hour), a Keith Moon se le ocurrió explotar su batería al final de My Generation. El cabello de Pete Towshend se chamuscó mientras el público se quedó sin palabras.
¿Volar un retrete con dinamita? ¡Por qué no!
A Keith le fascinaba el ruido de las explosiones, con unas chelas encima durante una gira en New York en 1968, se le hizo fácil volar el retrete con cherry bombs. La banda fue vetada de varios hoteles en Manhattan gracias a eso.
El mito de Moon arrojando autos a las albercas
Hay varios mitos en torno a la vida loca de Moon, entre ellos, el de arrojar al menos un par de autos en la piscina de la cadena Holiday Inn. Pero no hay fotos y los testimonios son contados. Pero lo que sí es cierto es que alguna vez chocó un Ferrari Dino valuado en más de 350 mil dólares de ahora.
Una noche loca, relevo de un fan
Luego de tomarse dos botellas de whisky y un cocktail de drogas, Keith Moon se durmió faltando tres rolas de un show en 1973 en San Francisco. Casual, Pete Towshend preguntó quién sabía tocar la batería y un tal Scott Halpin lo relevó. (Correr hasta 1:39 hroas).
Como todo rockstar, tenía amigos rockstars
Solía salir de fiesta con Ringo Starr, Harry Nilsson, David bowie, Alice Cooper, Brian Jones, Brian Wilson y otros que disfrutaban las bondades de ser una estrella de rock en los setenta.
En una de sus locuras, quería ser actor
Keith Moon soñaba con ser una estrella de Hollywood. Solía disfrazarse del Papa o de algún actor famoso. Apareció en varios filmes, como en la ‘pacheques’ que hizo Frank Zappa llamada 200 Motels.
Innovador en diseños de baterías
En su afán por ser diferente, un día se le ocurrió llenar una batería con¡ agua y peces. Después del show, una chica del público le preguntó qué pasaría con los peces y él contestó que tal vez sería la cena de esa noche.
Por: Emmanuel Gutiérrez