Mientras nos acabamos de remojar en toda la marea de comunicados que confirman y desmienten la polémica llamada entre Enrique Peña Nieto y Donald Trump, por el momento podemos decir que a otros les ha ido peor.
Al parecer México no es el único país que ha sido blanco del poco tacto diplomático del presidente estadounidense. En la lista pueden agregarse los siete países que a los que golpeó con su política migratoria y ahora Australia, a cuyo Primer Ministro colgó en nada cordial llamada telefónica en la que intentaban negociar sobre un acuerdo migratorio llevado a cabo durante la administración de Barack Obama.
Aunque la llamada en cuestión se realizó el sábado, la bomba diplomática explotó ayer por la noche cuando, con el sello de la casa, Trump publicó un tweet en el que calificaba de “tonto” el acuerdo que Obama había establecido con el gobierno australiano.
Do you believe it? The Obama Administration agreed to take thousands of illegal immigrants from Australia. Why? I will study this dumb deal!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 2 de febrero de 2017
El acuerdo
A finales del año pasado, Estados Unidos acordó recibir a mitad de una población de 2 mil 500 migrantes que pedían asilo y fueron detenidos en instalaciones ubicadas en alta mar en las islas del Pacífico, en Papua Nueva Guinea y Nauru. A cambio, Australia reasentaría a refugiados de El Salvador, Guatemala y Honduras.
Trump firmó una orden ejecutiva la semana pasada con la que suspendió el programa de refugiados de Estados Unidos y restringió la entrada al país a viajeros de países mayoritariamente musulmanes como Irán, Irak y Siria. El grupo de refugiados que forma parte del trato con Australia proviene de países que ahora aparecen en la orden de restricción temporal, lo cual facilitó a Trump dar la espalda al gobierno que fue su aliado en las guerras de Afganistán e Irak.
Por mucho, la peor llamada
De acuerdo con The Washington Post, Trump cortó de manera abrupta la comunicación que sostuvo el sábado pasado con el Primer Ministro australiano, Malcolm Turnbull. En la llamada, el mandatario estadounidense criticó el acuerdo migratorio y, además, se habría jactado de la forma en la que se llevó el triunfo en el Colegio Electoral, en las elecciones presidenciales de noviembre pasado.
Tras una conversación que se prolongó por cerca de 85 minutos, el exótico presidente finalizó repentinamente la llamada… le colgó, pues, no sin antes decirle a Turnbull que “había sido, por mucho, la peor llamada que había tenido con líderes mundiales”.
Vaya lugar de honor: ese mismo día Trump se la había pasado pegado al teléfono hablando con Vladimir Putin, y, anteriormente, con Shinzo Abe, de Japón, Angela Merkel, de Alemania, y Francois Hollande, de Francia… y claro, contando las llamadas sostenidas con Enrique Peña Nieto.
Al respecto, el sábado, el ministro australiano dijo que la llamada había sido abierta, franca y sí, algo candente, pero se negó a dar detalles de la conversación “privada”. ¿Les suena?
The Washington Post fue el primer medio en describir la llamada entre Trump y Turnbull, esto casi a la par que en México se ofrecían detalles de la comunicación sostenida entre EPN y el presidente de los Estados Unidos.