Esa ha sido una de las discusiones más acaloradas —¿vieron lo que hicimos ahí?— durante los últimos días. Las temperaturas en algunas de las principales ciudades del Reino Unido estuvieron en todas las portadas internacionales y la verdad es que no es cosa menor. Esta semana fue alarmante escuchar que Londres destrozó sus récords y superó los 40ºC, arriesgando la vida de las personas.

Aunque claro, hubo muchos comentarios y dudas al respecto.

“Un campo de trigo en la ola de calor del 19 de julio de 2022 en Zschepplin, cerca de Leipzig, Alemania”.Foto: Jens Schlueter-Getty Images.

¿Cómo es que no es noticia cuando 40ºC cocinan Mexicali, Tijuana o Mérida? ¿Por qué esa temperatura se le considera peligrosa en Reino Unido, pero no pasa nada cuando vemos más calor en Arabia, Irán o en Sonora? La respuesta es bastante interesante.

Todo tiene que ver con cómo nos adaptamos al calor y cómo la infraestructura de nuestras ciudades depende del clima en el que nos encontramos. Los ejemplos son sencillos: 40ºC en Australia significa que estamos frente a una calurosa tarde para salir a surfear, pero 40ºC en Londres implica la pérdida de vidas y una alerta de Emergencia que retumba en todo el mundo.

Para entenderle mejor, hablemos de la temperatura de mortalidad mínima.

Temperatura de Mortalidad Mínima

La Temperatura de Mortalidad Mínima o Minimum Mortality Temperature (MMT) es un concepto sacado de la academia que nos ayuda a conocer mejor cómo nos adaptamos al clima y qué tan grande, dependiendo de dónde vivimos, es el riesgo al que nos enfrentamos con las olas de calor.

Sin meternos mucho al enredo, esta MMT es la temperatura ideal para nuestra seguridad.

Foto: Cuartoscuro

Usando estadísticas de mortalidad y el calor promedio a lo largo del año, la Temperatura de Mortalidad Mínima es, literalmente, la temperatura en donde menos gente va a morir. Es un delicado balance: si hace más frío o más calor, la vida de las personas comienza a ponerse en riesgo.

¿La parte interesante? Esta MMT es completamente diferente en las ciudades del mundo.

No es el mismo calor en México, Londres o Panamá

Un estudio realizado por la MCC Collaborative Research Network midió la temperatura en diferentes ciudades de todo el mundo. Al final terminó con datos de más de 43 países y los resultados son bastante impresionantes. Puedes notar como cada ciudad —dependiendo su infraestructura o su clima promedio— se adapta las olas de calor para evitar las muertes. Ahí van varios ejemplos:

La temperatura de mortalidad mínima en Sydney, Australia es de 23.5ºC. En Brasilia, Brasil la temperatura ideal es 22.3ºC.

Foto: Cuartoscuro

Otras ciudades que están adaptadas para aguantar calores tremendos no te van a sorprender. La MMT de Mashhad en Irán es de 28ºC; la superpoblada Manila en Filipinas está estabilizada en 29.2ºC o la desértica Kuwait City, que encuentra su balance de adaptación en 31.1ºC.

Algunas otras ciudades del mundo dependen de temperaturas más frías para evitar las muertes. ¿Un ejemplo? Oslo, la capital de Noruega, tiene su temperatura de mortalidad mínima en 15.7ºC.

Aquí es donde tenemos que platicar del caso de Londres.

De acuerdo con las mediciones, la capital de Inglaterra está construida —y sus habitantes están adaptados— a una temperatura ideal de 18.8ºC. Eso nos pone en contexto lo peligroso que fue el calor de los últimos días pues, en tan solo una tarde, llegaron a 21 grados más que su punto ideal, poniendo la vida de miles en riesgo.

Foto: BBC

Como seguro les entró la duda: la temperatura de mortalidad mínima en la Ciudad de México es también de 18ºC (Imagínense ahora 40ºC en la CDMX).

Por último, los investigadores encontraron una relación notoria entre los diferentes climas o continentes. Acá les ponemos la gráfica, pero vean cómo los climas áridos o tropicales están adaptados mejor al calor y las personas que viven en ciudades alpinas sobreviven al frío.

Imagen: MCC Collaborative Research Network

¿Vieron como las personas del norte de Europa corren mucho riesgo con los aumentos de temperatura?

¿Por qué nos pasa esto?

Ahora ya sabemos que necesitamos de un delicado balance de temperatura para sobrevivir. Más frío y nuestra vida corre riesgo; más calor y las estadísticas de mortalidad se van por los cielos.

¿Por qué nos pasa esto?

Los factores detrás de la temperatura de mortalidad mínima son bastante interesantes y algunos son inesperados. Un estudio reciente publicado en el International Journal of Epidemiology encontró más de 10 factores que pueden definir qué tanto nos afecta el calor o qué tanto estamos preparados —en nuestras respectivas ciudades— para enfrentar los cambios repentinos de clima. Estos son algunos:

  • El nivel socioeconómico.
  • Más camas de hospital.
  • Cuántas personas viven en el centro y cuántas en la periferia.
  • ¿Qué tanto aire acondicionado hay instalado?
  • La edad promedio de la población.
  • La cantidad de parques o áreas verdes.
  • La urbanización o los efectos de isla de calor.
  • Densidad poblacional.
  • ¿Son rurales o urbanos?
  • Niveles de contaminación.
  • Infraestructura y ventilación.

Todos esos factores —y muchos más— pueden tener un efecto en cómo nos adaptamos al calor o qué tan peligrosas pueden ser estas altas temperaturas.

Siguiendo con la historia reciente de los 40ºC de Londres. En el Reino Unido, la edad media es superior a 40 años y los efectos de la isla de calor en su capital se han hecho presentes. También, su infraestructura histórica está hecha para contrarrestar los fríos inviernos.

Foto: Pexels

Un último ejemplo para despedirnos. El Metro de Londres está construido para mantener el calor que genera su propia circulación. En promedio está 11ºC más caliente que la superficie. En una mañana helada de enero, es una bendición… ¿pero qué pasa cuando en la superficie se están cocinando? Ahí es donde empiezan los problemas.

Todo lo que no sabías que necesitas saber lo encuentras en Sopitas.com

Soy Max Carranza y me he pasado la vida rodeado de memes, cultura digital y bastantes horas frente a las pantallas. En el camino me encontré la pasión por abordar los temas sociales más urgentes e intentar...

Comentarios