Nuevamente se dio un incidente con los neumáticos en el Gran Premio de Alemania, pero esta vez no fue culpa de Pirelli y sus reventones, sino de los mecánicos de la escudería Red Bull que no colocaron bien una llanta y al salir volando del auto de Mark Webber, ésta golpeó a un camarógrafo.
Tras el fuerte golpe, de inmediato ingresaron los cuerpos médicos a auxiliar al hombre de Formula One Management (FOM), la empresa que gestiona las transmisiones del Mundial de Fórmula 1, al que trasladaron a un hospital cercano para realizar los estudios pertinentes.
Paul Allen, es el nombre del cámara que se disponía a filmar y que según informes de la empresa, “se encuentra bien y pronto se recuperará”. La cosa no terminó aquí, de inmediato comenzó una investigación, como de costumbre se hace en el Gran Circo, y tras unas horas se dio a conocer que Red Bull sería multado con 30 mil euros por el error cometido.
Sabía que habíamos perdido el neumático en la parada en boxes, por supuesto, pero no que alguien fue golpeado por ella. Eso es malo y espero que esté bien, eso es lo principal, comentó Mark Webber tras el accidente.
Además de la sanción, Bernie Ecclestone se ha puesto a trabajar desde ya en ese tema, estudiando la posibilidad de que en el futuro, los camarógrafos que realizan su trabajo en la zona de pits, sean reubicados en el llamado pit lane, para intentar ponerlos a salvo de un problema como el que se dio en Nürburgring.