La próxima semana es Halloween y aunque sea una celebración gringa (un poco deformada con los años), se ha vuelto una fiesta celebrada en nuestro país.
Para empezar, Halloween es una contracción de All Hallow’s Eve o Víspera de Todos los Santos. Es una celebración de origen celta, vinculada con la conmemoración del Samhain o “fin del verano”, donde se conmemoraba el fin de la temporada de cosechas y comenzaba la estación oscura o invierno.
Se creía que en este día, la línea que dividía al mundo de los vivos y de los muertos se estrechaba, por lo que los espíritus podían pasar a través de ella. Los espíritus de los familiares eran invitados y conmemorados, mientras que los malignos eran alejados por medio de mascaras y trajes para ahuyentarlos (ahí comenzó la tradición de disfrazarse).
Poco después, los papas Gregorio III y IV en el siglo VIII y IX, intentaron suplantar esta práctica por algo más católico, moviendo la fecha al 1 de noviembre y nombrándolo “Día de Todos los Santos.”
El Halloween tomó fuerza en Estados Unidos y Canadá hasta 1921, y se internacionalizó hasta los años 70 y 80, gracias al cine. En la actualidad se celebra como todos lo conocemos, fiestas de disfraces, pidiendo dulces, casas “embrujadas”, maratones de películas de terror y disfraces de sexy-bombera, sexy-policía, sexy-bruja, sexy-quesadilla, etc.
Y bueno, después de esta pequeña historia del Halloween (para se luzcan en su pachanga y queden bien con la enfermera sexy), les traemos unas opciones de disfraces más ad hoc a una “noche de terror”, por si están cansados del típico disfraz de fantasma, Drácula, bombero, etc.
Slender Man
Mitad Sweney Todd, mitad Mrs. Lovett
Steampunk Frankenstein
Audrey Hepburn Zombie
Maestro limpio
El Resplandor
Randy Marsh
Personajes en blanco y negro
Baño portátil
Dinosaurio
Bebé zombie
Una pintura de Van Gogh
Nube lluviosa
Lámpara kitsch
Power Loader Baby de “Aliens”
Banksy
Magritte
Ecce Homo
El hombre espejo
Alien