Hace unas semanas les hablamos sobre el “2012 DA14”, un asteroide de 50 metros de diámetro que el próximo viernes 15 de febrero pasará a 27,600 kilómetros de la Tierra, una distancia muy corta en términos astronómicos.
Y es que a pesar de que esto no representa ningún peligro para nuestro planeta, el tránsito del asteroide será tan cercano, que algunos científicos creen que existe una remota posibilidad de que éste choque con alguno de los más de 100 satélites geoestacionarios que se cruzarán en su órbita.
Si lo anterior llegara a suceder con un satélite dedicado a las telecomunicaciones, la señal de los teléfonos celulares podría verse afectada. Así lo ha asegurado el Dr. Dan Brown, científico de la Nottingham Trent University, quien señala al respecto:
Hay un montón de ellos (satélites), pero estamos hablando de un área muy grande. Sería muy desafortunado si un satélite fuera golpeado. El asteroide tiene más probabilidades de golpear un poco de chatarra espacial, pero la mayoría de ésta es de sólo un centímetro de diámetro y el impacto ni siquiera se notará.
El paso de “2012 DA14” será tan cercano que incluso podrá verse con unos simples binoculares o un telescopio de aficionado, sin embargo, debido a la velocidad del objeto (30,000 km/h) sólo aquellos que hayan identificado la zona previamente, podrá disfrutar del asteroide que será visto como un rápido y brillante punto en el cielo. Lamentablemente, el momento de mayor acercamiento a la Tierra será alrededor de las 19:24 horas GTM, lo que aquí en México sucederá a las 13:24 horas, así que no podrá ser visto por la luz del día.
Los astrónomos alrededor del mundo estarán atentos a lo que suceda el próximo viernes, pues más allá de la posibilidad de choque con algún satélite, la distancia a la que el “2012 DA14” pasará respecto a la Tierra, es la más cercana que se haya registrado desde que la NASA ha estado observando esta clase de cuerpos espaciales. Esto servirá para estudiar más detalladamente al asteroide que se cree, podría impactar con nuestro planeta en un futuro.
Así que ya saben, pongan a cargar los walkie-talkies por si las moscas.