En el siglo XIX un estudioso llamado Barkham Burroughs escribió una enciclopedia de “información útil” y entre las cosas que comentaba se encontraba la belleza. De ahí salieron estos 11 consejos del infierno que no sólo son terribles para la belleza femenina, también lo son para la salud.
1. Báñate seguido…
Por lo menos una vez a la semana (ajá), aunque una señorita por lo menos se sumerge en agua o se da un baño de esponja tres veces a la semana.
2. El jabón ya pasó de moda
¿Saben qué es mejor que el jabón? ¡El amoniaco! Según Burroughs: “una dama que compruebe su efectividad, jamás lo dejará”. Te deja la piel como si le hubieras pasado lejía, así o más limpia.
3. Lávate los ojos
Para conservar ese brillo que vuelve locos a los caballeros, lávate bien los ojos con jabonadura. Si no es tu estilo, solo ponte perfume directo a los globos oculares. Para evitar el ardor, puedes usar media docena de gotitas de whisky.
4. Pero no te laves el cabello
¡Cuidado!, el agua es extremadamente perjudicial para el cabello. Solo sacude el polvo del día anterior con una toalla y cepilla durante 30 minutos.
5. Y jamás, jamás laves tu cara
En lugar de lavarte la cara con esa sucia agua, ponte ungüento de glicerina con un algodón. De acuerdo a Burroughs, una mujer hermosa “no lava su cara en tres años, y aun así está siempre limpia, sonrosada, dulce y lista para ser besada”.
6. Tampoco las manos
Las manos perfectas deben ser pálidas, suaves y sucias. Se tiene que tener el mismo régimen que con la cara. Si tus manos son rojas, puedes regresar al saludable blanco “sumergiendo tus pies (?) en agua caliente lo más posible”. Una señorita de manos hermosas, no deja que toquen el agua en un mes.
7. Baños de vapor
Aunque no lo creas, estos tampoco involucran al agua. El procedimiento es sencillo: quítate toda la ropa (en serio) y asómate por la ventana, ahí por donde los rayos solares entran. Un buen baño de vapor dura alrededor de una hora. Cualquiera diría que eso te hace sudar y oler mal, pero el dr. Burroughs asegura que es bueno para la piel.
8. Ponte metales pesados en los ojos
No hay nada que diga “chica guapa” con más potencia que las arrugas en los párpados. Si la naturaleza no te ayudó en este rubro, no te apures, sólo necesitas colocarte hidróxido de mercurio mezclado con manteca en los ojos. Cada parpadeo será electrizante.
9. Adiós a los guiños
Las pestañas suelen ser unas desgraciadas, en cada evento importante suelen “ponerse rebeldes”. Recorta tus pestañas todos los días con unas pequeñas tijeras. Después de todo, ¿a quién le gustan esos horribles pelos parados en los ojos?
10. Succión de labios (no es lo que tú crees, es peor)
Los labios son un elemento fundamental en la belleza de toda mujer y deben ser cultivados desde la más tierna infancia. Para combatir los labios delgados, solo se necesita usar el procedimiento de la “succión”. Es decir, que te saquen sangre alrededor de los labios constantemente los mantendrá hinchados, y ¡violà!, labios hermosos al instante.
Así que ya lo saben señoritas, escuchen al tío Barkham cuando dice: “no puedo conciliar mi corazón o mi hombría con una mujer que no pueda permanecer sin lavarse la cara”. Adiós al agua y hola al amoníaco.
(Por si alguien no lo notó, estos consejos son terribles. ¡No los sigan, por el amor de dios! La gente en el siglo XIX estaba muy mal, no hagan nunca nada de lo que ellos digan.)