El 2008 fue un año triste para la música, y en especial para la música perteneciente al repertorio de Universal Music Group (UMG). Para los que no sepan o no recuerden, ese año se desató un incendio en el lote trasero de Universal Studios Hollywood arrazando con 50,000 copias archivadas de videos y películas digitales y de 118,000 a 175,000 cintas maestras de audio. Los daños fueron tan grandes, que 12 años más tarde, confirman que algunos de los archivos afectados pertenecen a Nirvana y Elton John.
El incendio destruyó tres acres de terreno, incluida una bóveda propiedad de UMG. Un par de informes del New York Times en junio de 2019 alegaban que las grabaciones o las cintas maestras originales de más de 800 artistas se vieron afectadas por el incendio. Cintas que no volveremos a escuchar o simplemente nunca escucharemos.
En los nuevos documentos legales obtenidos por Rolling Stone de la demanda colectiva en curso contra UMG que fue presentada por algunos de los artistas afectados por el incendio, reconocieron que las “grabaciones maestras originales” de personas como Elton John y Nirvana “se vieron afectadas” por el fuego. Este archivo de la demanda también menciona otros nombres que duele mucho ver por ahí: Sheryl Crow, Soundgarden, R.E.M., Peter Frampton, Sonic Youth y Beck.
En mejores pero confusas noticias por el cúmulo de de declaraciones que ha hecho UMG desde el año del incendio, dijeron que existen algunos “clones digitales” o “reemplazos” del material dañado, incluidas grabaciones de Beck, Nirvana, R.E.M., Soundgarden y Jimmy Eat World. Pero los abogados de los artistas involucrados en la demanda colectiva buscan establecer una lista completa de las grabaciones que se perdieron o destruyeron en el incendio.
Howard King, uno de los abogados de los artistas detrás de la demanda colectiva, dijo en un comunicado: “Universal afirmó que 17,000 artistas fueron afectados por el incendio cuando demandaron por daños y perjuicios. Ahora que enfrentan una demanda por parte de sus artistas, afirman que solo 19 artistas fueron afectados. Esta discrepancia es inexplicable”. La verdad, una diferencia de este tamaño es demasiado grande para no ser sospechosa.
