Un 9 de agosto del año 1986, hace 36 años para ser exactos, miles de personas disfrutaron del último concierto que Freddie Mercury ofrecería como el líder de Queen, banda que al igual que él sigue vigente a pesar del fallecimiento del músico ocurrido el 14 de noviembre de 1991.
Fue en el Knebworth Park, el parque más grande de Inglaterra que Queen logró abarrotar y lugar que el cuarteto inglés escogió para dar fin a su gira ‘The Magic Tour’, con la cual ofrecieron varios shows en Europa para promocionar su disco ‘A Kind of Magic’ que estrenaron en ese año.
Queen agendó el cierre de su gira en el Knebworth Park de Inglaterra
Para ese entonces Queen ya gozaba de fama y renombre gracias a varios discos de estudio publicados, así como la presentación en el Live Aid que un año antes consagró a Freddie Mercury y compañía, por lo que ver el nombre de la banda en algún recinto era un sold out asegurado.
Si bien Mercury y compañía lograron agotar un par de fechas en lugares como el Estadio de Wembley, la banda quería cerrar con broche de oro la gira en cuestión. Fue así que se organizó un espectáculo en el Knebworth Park, donde contaron con el apoyo de tres bandas teloneras: Belouis Some, Status Quo y Big Country.
De acuerdo con blogs de fans de Queen y testimonios recabados en internet desde entonces, fueron poco más de 120 mil personas las que se reunieron en dicho parque inglés donde los asistentes tuvieron prohibido ingresar con ningún tipo de recipiente ni cámaras fotográficas.
Las puertas se abrieron al medio día y debido a que las autoridades y organizadores permitieron a los seguidores el acampar, las calles alrededor del Knebworth Park comenzaron a colapsar desde las primeras horas, ya que nadie quería perderse el concierto más grande de Queen.
Más de 120 mil personas se reunieron para ver a Queen cerrar su ‘The Magic Tour’
En un video que se grabó antes del concierto se pudo comprobar cómo a horas antes del show el parque estaba repleto de equipo de sonido y con su capacidad casi al máximo. Por otro lado, también apreciamos a la banda siendo transportada en helicóptero hacia el recinto.
Ese día Freddie Mercury usaba su icónica camisa hawaiana color amarilla con un par de lentes. El cuartero salió del helipuerto de Battersea y sobrevoló el río Támesis durante varios kilómetros hasta llegar al Knebworth Park, donde los esperaban para llevarlos al backstage.
En el mismo clip del backstage podemos ver a Freddie Mercury lleno de energía y preparándose física y vocalmente para salir al escenario, imágenes que a nadie le hubieran hecho pensar que en entonces el cantante ya se sentía muy cansado de las constantes giras y el ritmo de vida que llevaba.
Luego de que las bandas teloneras (a las que no recibieron tan bien que digamos) hicieran lo suyo, Freddie Mercury, Brian May, John Deacon y Roger Taylor salieron al escenario para deleitar a quienes durante horas estuvieron bajo el sol esperando por ellos.
Freddie Mercury dio uno de los shows más enérgicos e increíbles en su carrera con Queen
Esa noche del 9 de agosto de 1986 el cantante británico usó la mítica chaqueta militar amarilla que su amiga Diana Moseley le diseñó para la gira. Irónicamente sólo hay fotos de eso, pues el concierto sólo se grabó en audio y no en video. Una lástima considerando que muchos hablan de ese show como algo único.
Durante dos horas la banda británica regaló una presentación inigualable sobre el escenario, donde los fans enloquecieron. Mercury estaba lleno de energía y entonó varias canciones que se han convertido en himnos para sus seguidores, tales como “Under pressure”, “Another One Bites The Dust”, “Radio Ga Ga”, “I Want to Break Free”, “Bohemian Rhapsody” y más.
El show finalizó con “God Save the Queen” de fondo, con Brian May en la guitarra y un “Muchas gracias a todos. Buenas noches y dulces sueños, los amamos” por parte de Freddie Mercury que se despidió de su público usando una capa de terciopelo rojo, una corona, un cetro y un micrófono.
Finalizando el concierto desapareció la magia: primero porque Freddie Mercury le dijo Brian May y compañía que ya no podía más y su cuerpo estaba “destrozado”. Y después, por la tragedia que ocurrió durante su show y la cual no notaron.
Aunque se vio manchado por una muerte ocurrida durante el show
Y es que durante la presentación de la banda un joven escocés de 21 años llamado Thomas McGuigan, había sido apuñalado durante una pelea que se dio en el concierto de Queen, donde los servicios médicos no pudieron salvarle la vida debido a la cantidad de gente que no los dejó llegar a él a tiempo.
El trago se tornó aún más amargo cuando al año siguiente Freddie Mercury se enteró de que tenía VIH, condición que el cantante reveló sólo a sus compañeros, con los que alcanzó a grabar otros dos discos de estudio mientras luchaba con la enfermedad sin saber cuál sería su destino.
Todos recordarán el concierto en Knebworth Park como el último que Freddie Mercury dio con Queen
Sus compañeros de banda –en realidad sus verdaderos amigos– guardaron el secreto hasta el final, pues siempre negaron cualquier rumor que la prensa buscaba confirmar a través de entrevistas, donde siempre salía a relucir el tema de la salud de Mercury.
Así fue hasta el 23 de noviembre de 1991, día en el que Freddie Mercury hizo pública su enfermedad. Una que extrañamente provocó su fallecimiento justo al día después y que lo llevó a no volver a pisar un escenario.
Fue ahí cuando muchos se dieron cuenta de que los asistentes del Knebworth Park, en 1986, vivieron un hecho histórico sin saberlo, pues ese día fue el último en el que vieron y escucharon a Freddie Mercury cantar sobre un escenario.