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Las imágenes de lo ocurrido el fin de semana pasado en Houston las vimos todos, son fuertísimas y dieron la vuelta a todo el mundo. Parece increíble que en pleno 2021, cuando todos estamos regresando a conciertos, festivales y eventos masivos, ocurra una tragedia de esta magnitud que a todas luces pudo ser evitada.
Astroworld es un festival organizado por Travis Scott y aunque el fin de semana pasado llegó a la cumbre de la desorganización, la verdad es que desde siempre ha sido un desastre. La seguridad es muy relajada con el público y eso cuando lo combinas con fanáticos extasiados de ver al rapero, nunca es buena combinación. Son tan “apasionados” que los boletos de este año se acabaron en 10 minutos aun cuando nadie conocía el cartel.
Desde las primeras horas del festival, las medidas fueron deficientes en cuanto a seguridad. El acceso al festival fue caótico e incluso se registró un famoso portazo a través del acceso VIP donde todo el personal de seguridad fue hecho a un lado mientras asistentes (con y sin boletos) entraban en medio del caos.
Esa fue la primera luz roja en la organización, sin embargo no fue la única.
El mismo jefe de la policía de Houston, Troy Finner, estaba preocupado antes de que iniciara la presentación de Travis Scott. La multitud estaba eufórica y claramente la seguridad no estaba a la altura por muchos motivos.
Según un reporte de The New York Times, Troy Finner se acercó personalmente a Travis Scott previo a su presentación para externar su preocupación por la “energía del público” y la falta de personal de seguridad que podría desembocar en un caos, cosa que tristemente sucedió.
El caos se anunció con horas de anticipación…
Los asistentes al evento reportaron que media hora antes de que iniciara el concierto del rapero, apareció un contador de 30 minutos en las pantallas precisamente para anunciar el tiempo que faltaba. Ese contador inició en la multitud la locura que, según los asistentes, sólo fue incrementando conforme se acercaba a cero.
Los reportes indican que desde estos momentos ya era imposible moverse si estabas dentro, la gente estaba empezando a desmayar, a ser golpeada… Y aún no comenzaba el concierto.
A las 9 en punto, Travis Scott subió al escenario y como era de esperarse, el caos estalló, arengado por el propio rapero, quien es famoso por incitar al éxtasis a los asistentes de sus conciertos con los gritos de “rage!, rage!”
No fue sino hasta las 9:38 pm que la organización del evento empezó a notar que tal vez esto se les había salido de las manos y pidieron refuerzos para controlar a la multitud, claro que nunca lo lograron y de pedir refuerzos, pasaron a declarar al evento un “incidente de víctimas masivas”.
Uno pensaría que el festival sería cancelado en este punto, pero no. La música siguió sonando hasta pasadas las 10:10 de la noche cuando se dio por suspendido el concierto. Sí, Travis Scott intervino un par de veces para tratar de calmar la situación, pero nunca detuvo su presentación.
8 personas perdieron la vida, más de 300 resultaron heridas y lo ocurrido en Astroworld debe servir para repensar nuevos protocolos en eventos masivos.
Tras lo ocurrido con Pearl Jam en el Festival de Roskilde en el año 2000, Europa prohibió los moshpits y el crowd surfing en festivales y conciertos masivo. Tal vez, sea momento de pensar en medidas que puedan evitar tragedias como la ocurrida el fin de semana en Houston, Texas
Esta semana en Tutti Frutti
Esta semana el gran Damon Albarn estuvo de invitado en el podcast donde platicamos sobre su nuevo disco solista: The Nearer the Fountain, More Pure the Stream Flows. Sé que ya en nadie cabe duda pero este podcast va a reafirmarlo: Damon es el narrador de nuestra era: