Y por fin, la expectativa terminó y llegó la primera visita de Abel Tesfaye a nuestro país. The Weeknd se plantó en el escenario como solo él lo sabe hacer. Si bien, la lluvia comenzó a hacer de las suyas desde muy temprano y parecía que sería la responsable de disminuir la convocatoria, cuando subió el estadounidense al escenario, el festival estaba a reventar.
Antes de St. Vincent, y The Chainsmokers, aún parecía que había poquita gente en el festival. Unos rondando entre las activaciones, otros escondidos por ahí, pero muchos más esperando a que bajara la lluvia para lanzarse al Parque Fundidora para ver a Abel.
Quienes presenciaron la primera escala de The Weeknd en México como headliner del festival Live Out pudieron comprobar las leyendas que se vienen contando desde Abril, en Coachella, y Agosto en Lollapalooza. Un llovizna imparable fue su acto abridor y pensó mal quien supuso que el clima húmedo sería obstáculo para que el canadiense demostrara que está a la altura del hype que ha mantenido durante siete años de carrera.
Tomando en cuenta la artillería que los headliners de festivales deben traer consigo para causar una impresión que rompa internet, The Weeknd es minimalista de la vieja escuela. Sin invitados especiales, ni cambios de vestuario, ni escenografías transformistas su set es voz, banda y visuales. Esto, más que desventaja, es cualidad. Dejemos a Kanye y Beyoncé montar las superproducciones, lo de él es la intimidad. ¿La clave? Mucha voz.
Aún en la incontrolable acústica de los festivales, en la que el viento, ruedas de la fortuna o masas de gente que peregrinan de uno a otro escenario pueden alterar el sonido de un show, la voz de Abel Tesfaye se impone y tiene la exacta textura oscura-emo-R&B que hay en la producción de sus tracks. Esta elección de salir al escenario sin demasiado acompañamiento tiene su mérito si recordamos que en sus primeras presentaciones lo invadía el nerviosismo. A más de un año de haber iniciado el tour “Starboy: Legend of the Fall”, la presencia de Tesfaye en el escenario es dominante, y así lo demostró en Live Out 2018.
Si la división entre los fans de su etapa emergente y los fans de su sonido mainstream es tan marcada como se dice, el setlist de lo que presentará igualmente en El Palacio de Los Deporte invita a una tregua entre ambas audiencias. Entre las veintidós canciones, además de casi todo “Starboy”, pasa por favoritas de su antesala al superestrellato: “House of Balloons / Glass Table Girls”, “The Morning”, “Wicked Games” y “Crew Love”, intercaladas con covers como “Might Not”, de Belly; “Or Nah”, de Ty Dolla $ign’s y “Low Life”, de Future.
Veredicto: expectativa y realidad coinciden en un concierto de The Weeknd.
Acá les dejamos una galería de fotos:
Por: Maximiliano Torres