The Strokes están en un lugar apartado en la historia moderna de la música. Este proyecto echó a andar las ganas de muchos por hacer rock al inicio de este milenio, a base riffs pesados y letras que tenían una brutal sinceridad. Desde el clásico Is This It, eran lo más emocionante en un género aparentemente en peligro de extinción.
Vaya que ha sido un viaje el de Julian Casablancas, Albert Hammond Jr., Nick Valensi Nikolai Fraiture y Fabrizio Moretti, que han lanzado cinco discos de estudio, un par de EPs y muchos proyectos alternativos a The Strokes.
Envueltos en la sospecha general sobre cuándo lanzarían un nuevo álbum, rumores sobre peleas entre ellos y el magnetismo autodestructivo de su vocalista, al fin lanzaron The New Abnormal, primer disco en siete años, producido por el legendario Rick Rubin (AC/DC, RATM, Metallica).
Nos dio un poco de miedo lo atinado que fue el título, en esta realidad nueva y anormal, en la que nos encontramos encerrados, por lo menos con nueva música de una banda de este tamaño.
El mayor logro y spoiler de este disco, es que Casablancas unió los mundos de Strokes y Voidz con bastante éxito, uniendo la musicalidad y riffs de su primera banda, con temas y texturas de la alterna. Además, Hammond y Valensi se vieron muy clavados en el trabajo de guitarras, que de nuevo se siente divertido y complejo, con respuestas de una lira a otra en todo el álbum.
La abridora “The Adults Are Talking” es una joya en el trabajo de guitarras, silencios y Julian brilla con una voz limpia, contrastante a sus inicios con voz rasposa y enojada. Las palabras insisten en tirarle a los círculos sociales que controlan el mundo, en una balada maquilada a la perfección. Por un momento, pensamos que la espera valió la pena.
Estos cinco amigos, como se les ve en su nueva serie derivada de la cuarentena traen nueve canciones que dan 45 minutos de material nuevo. Bueno, no todo, ya que usaron dos canciones ajenas nota por nota. “Dancing With Myself” de Billy Idol es la base de “Bad Decisions”, y de “The Ghost In You” de The Psychedelic Furs, es “Eternal Summers.”
El disco se siente vivo, añaden pedazos de conversaciones entre la banda, lo que nos hace sentirnos en un ensayo que les salió bien. La grabación en el estudio Shangri La, y la producción son magistrales y se agradecen los niveles precisos en la distorsión, las nuevas texturas (mención a los sintes de “Why Are Sundays So Depressing?”).
Casablancas se compromete a cantar mejor, algo que hace un par de discos no nos sorprendía, pulió sus agudos y hasta los gritos, que usa mucho menos. Ojalá veamos lo mismo en vivo. El mejor ejemplo de esto es “Selfless”, en la que sube su voz hasta donde puede llegar:
A cualquier fan le emociona que este disco es un relanzamiento de los Strokes en la relación de la banda y en la producción musical. A diferencia de los primeros discos, en los que Casablancas se lleva el crédito de composición, en este, el crédito lo tienen como The Strokes, colectivamente. La portada es una obra de Jean-Michel Basquiat, en homenaje al mítico baterista de Jazz, Charlie Parker. Pueden comprar la edición de lujo con un bello vinil blanco y un libro por acá.
Las nueve canciones están cargadas de conceptos y las visiones de Julian en varios temas: la sociedad controlada, sus relaciones pasadas, el fracaso amoroso y Nueva York. “Ode to the Mets” es uno de los mejores momentos de esta nueva fase de los Strokes. Melancolía pura, un órgano y el deseo de recuperar los viejos tiempos, cierran el disco a la perfección. Aquí desquita su capacidad como letrista, sencillo y efectivo, nos transmite una tristeza especial:
Para quienes han visto a los Strokes en vivo, con los recientes setlists de “grandes éxitos”, ver la gira de este disco será una experiencia totalmente distinta, y era necesario algún tipo de renovación para los estadounidenses. Pensar en las nuevas baladas cantadas en vivo, o rolas totalmente distintas como “The Adults Are Taking” o “At The Door”, nos emociona bastante.
Las baladas más densas, como “Selfless” y “Not The Same Anymore” nos ponen a bailar lento mientras cantamos sobre temas románticos. En estas reflexiones Casablancas se lució, con varias frases que nos robaremos para aplicar en alguna relación.
Hubiéramos apreciado que todas las ideas, musicales y de letras, hubieran tenido más extensión, porque la espera fue mucha. Tal vez la duración de una hora, con 2 o 3 canciones más, nos hubiera dejado satisfechos y con más contenido para disfrutar.
Tracklist
1. “The Adults Are Talking”
2. “Selfless”
3. “Brooklyn Bridge to Chorus”
4. “Bad Decisions”
5. “Eternal Summer”
6. “At the Door”
7. “Why Are Sundays So Depressing”
8. “Not the Same Anymore”
9. “Ode to the Mets”
