La cumbia es uno de los géneros más populares en latinoamérica, es el registro sonoro de parte de las historias personales de la periferia hispana que está compuesta por bajos, trompetas, congas, maracas, flautas y toda una diversidad de instrumentos.
Para un latino la cumbia es más que un sonido, es un conjunto de movimientos casi coreográficos que se vuelven válvula de escape o simplemente una manera de conectar a través del baile y la música.
Es así como en esta emisión platicamos con una de las bandas que casi podríamos llamar de culto de la Ciudad de México y quienes cargan el estandarte de la cumbia, sí, hablamos de El Sonido Gallo Negro, quienes importaron ese legado para transformarlo en algo propio.
Nos hablan de las serenatas que están por suceder y las tragedias que no podemos evitar; de lo cósmicos que se pueden poner nuestros cielos y la posibilidad de bailar durante nuestras más profundas tristezas. Los cumbiamberos o chicheros peruanos comenzaron un sonido que hizo llorar a millones bajo distintas denominaciones: la cumbia andina, selvática y norteña que se hizo chilanga y espacial.
Con guiños a B-52’s y a pioneros de la música electrónica como Juan García Esquivel y Florian Schneider, el nuevo álbum de estudio de la agrupación, Paganismo, reúne mambo, cumbia y sonidos contemporáneos en una mezcla novedosa que resulta innovadora para la época.
Sin más, los invitamos a escuchar esta emisión de cumbia psicodélica.