Llegó la tercera llamada y el grito de la gente no se contuvo. El audio del Palacio de los Deportes introdujo un speech bastante motivador que le subió el ánimo, ya de por sí a tope, a los asistentes… Y por poquito antes de las 9:00 PM, puntual como pocos, subió Siddhartha al escenario.
El cantante oriundo de Jalisco se encuentra en uno de los mejores momentos de su carrera sin duda, y la prueba son estos dos sold out en el llamado “Domo de cobre” que forman parte de esta nueva etapa del disco 00:00 lanzado hace unos pocos meses.
La segunda noche -seguro que igual que la primera- estuvo bastante buena y aquí, les contamos un poco de lo que se vivió el pasado 2 de septiembre en el Palacio de los Deportes.
La segunda noche de Siddhartha en el Palacio inició con todo
Uno sabe que ir a un concierto de Siddhartha es comenzar a desbordar emotividad desde el primer momento. Así pasó cuando el compositor y su banda echaron a andar “No es antes ni es después”, que aunque es de las rolas más nuevas del repertorio ya la gente la corea como si fuera un tema de hace tiempo.
Y de inmediato, todo se puso bien romántico con “80 horas” también del nuevo disco. Vamos arrancando apenas, pero aquellos y aquellas que van con su pareja ya empezaban a poner bien melosos compartiendo miradas que lo decían todo: esta noche llena de música era para enamorarse todavía más.
Siddhartha no de hablar demasiado con el público en el arranque, pero no hace falta cuando las rolas hablan por sí solas. Desde las pantallas, se le nota esa sonrisa que confirma que está conectadísimo con sus fans y con eso detrás, sonó tan poderosa como épica “Ser parte”.
La nostalgia de su discografía, una invitada especial y llegaron los clásicos
En una de sus primeras interacciones más amplias con la gente, Siddhartha detalló lo que significa para él cada disco y cómo siente que la gente ha abrazado ese sentir tanto como él mismo. Agradece la gran comunidad que se ha hecho en torno a su música y enseguida nos pone nostálgicos con “Buscándote”.
Claro que también hubo un momento para bailar. Las vibras funky de corte indie llegaron con “Fuma”, ese temazo que Sidd lanzó hace unos años junto a los también rifados Technicolor Fabrics. Después, vino “Mapa” que contó con una invitada muy especial: Eunice Guerrero de Valsian, la banda que abrió el show (que por cierto, muy rifados, eh).
Ya estábamos llegando a la mitad de la presentación y se vino un trancazo de nostalgia con dos canciones de esas que ya podemos considerar clásicos enormes de Siddhartha. Sí, luego de extender un saludo a la pista, las gradas y demás, el cantante tocó “Náufrago” para ponernos en un mood sentimental todavía más intenso del que uno pudiera imaginar. Seguidita, se hizo sonar “Bacalar” para continuar con las sensaciones nostálgicas a tope.
“A la distancia” siguió y todo el Palacio de los Deportes no dudó en prender las lámparas de su celular; una señal que dejaba claro el vínculo que hay entre el artista y sus seguidores. Pura magia y toda la onda.
Siddhartha cerró como los grandes el concierto
Más rolas geniales siguieron sonando como “El chico”, “Tardes” (otro clasicazo), “Me hace falta”, “Algún día” y más. Pero sin duda, uno de los mejores momento se vivió cuando Siddhartha y compañía tocaron “Loco”, la cual abrió pidiéndonos que nos uniéramos como una entidad más allá de en quién creyéramos que está ‘allá arriba’.
Y agárrense porque la noche también incluyó la grabación de un video musical. Quiénes estuvieron ahí, ya lo sabrán, pero no les diremos a los demás para que haya emoción… así que atentos.
Ya casi para despedirse, Siddhartha sorprendió a todos cambiando de escenario a una pequeña tarima en medio del Palacio a la que solo subió él. Cuando se pasó a ese lugar, se acercó y le dio la mano a los fans con todo y sonrisa incluida. Había ahí tanto una batería como un piano montados; se dejaron venir entonces “Extraños” y “Control”, esta última para recordar los viejos tiempos de cuando arrancaba su carrera como solista, y bueno, también esa época en la que era uno de los bateristas más reconocidos de la escena alternativa de México.
Ha sido una noche espectacular con romance, emotividad, sorpresas y canciones de esas que calan en el fondo a más no poder. Y como era debido, había que cerrar en grande. De regreso al escenario principal, Siddhartha trajo al Mariachi Águila de México para rematar con “00:00” y una versión muy cool de “Únicos”. Detallazo para un show que los fans no olvidarán.