Lo que necesitas saber:
Las series y películas pueden ser máquinas del tiempo que nos ayuden a recordar joyas musicales que creíamos olvidadas.
Hay veces en que estás viendo una serie o película, todo normal, y de pronto… ¡zas! Empieza a sonar música que te parece familiar. De la nada, una escena random te conecta con una canción que pensabas olvidada, y entonces ahí estás: buscando el título en Shazam, agregándola a tu playlist de “rolas chidas” y sintiéndote emocional sin razón aparente.
No es casualidad. En los últimos años, el cine y la televisión se han convertido en auténticas máquinas del tiempo sonoras. Las plataformas de streaming no solo están contando buenas historias, también están armando unos soundtracks brutales que reviven joyas del pasado.

Y lo mejor es que no importa si eres de la vieja escuela o si apenas estás descubriendo estas canciones: la música –cuando entra bien con una escena– te atrapa, te mueve y te hace regresar a buscar más. Es por eso que acá recordaremos algunas series y películas que nos devolvieron canciones que merecen sonar otra vez por lo alto.
Repasemos 10 series y películas con las que redescubrimos música cool
Stranger Things
Cuando se estrenó en 2016, Stranger Things nos dejó claro que su universo era un homenaje a la cultura pop ochentera. Y eso incluyó un soundtrack que parecía creado por un adolescente de 1985 (y estamos seguros que la serie hizo que miles buscaran en Shazam canciones que sus papás tenían en vinilo).
Desde Joy Division, New Order, Devo, Talking Heads, Echo & the Bunnymen, Duran Duran, The Psychedelic Furs, New Order, Siouxsie and the Banshees y Peter Gabriel hasta The Clash, Scorpions, The Police, Cyndi Lauper, Madonna, Wham!, KISS y Metallica. Una fina selección de rolas que te regresan a los 80.
Quizá, el momento musical más icónico de Stranger Things llegó en la cuarta temporada con “Running Up That Hill” de Kate Bush. La canción se volvió viral casi 40 años después de su lanzamiento, rompiéndola durísimo en las listas de popularidad globales. La serie de Netflix transformó la nostalgia en tendencia y nos hizo recordar varias joyas musicales.
Guardians of the Galaxy
Cuando James Gunn armó el primer Awesome Mix para Guardians of the Galaxy, no solo creó un mixtape de sirve como gancho emocional para el personaje de Peter Quill, sino que construyó uno de los soundtracks más influyentes del cine moderno.
Con rolas como “Hooked on a Feeling” de Blue Swede, “Moonage Daydream” de David Bowie, “The Pina Colada Song” de Rupert Holmes, “Ain’t No Mountain High Enough” de Marvin Gaye o “I Want You Back” de The Jackson 5, la película revivió el soft rock y el funk de los 70.
El resultado fue un aumento masivo en reproducciones de esas canciones en plataformas digitales, gracias a las nuevas generaciones que se enamoraron de estos temazos. El mixtape nostálgico de Guardians of the Galaxy sea convirtió en un personaje más dentro del MCU, con el poder de conectar generaciones por medio de la música.
500 Days of Summer
Definitivamente, 500 Days of Summer fue una película que marcó a toda una generación. Esta comedia romántica indie de 2009 protagonizada por Zooey Deschanel y Joseph Gordon-Levitt se volvió un clásico millennial, y gran parte de su éxito se debió al cuidad y espectacular soundtrack que se armaron.
Con canciones de The Smiths, Regina Spektor, Hall & Oates, Simon & Garfunkel, Wolfmother, The Temper Trap, Black Lips, Doves y Feist, la película nos presentó varios momentos clave que se construyeron alrededor de rolas icónicas y, a veces, olvidadas (sobre todo si no estás clavado en el lado alternativo.
Una escena clave es cuando Summer escucha “There Is a Light That Never Goes Out” en los audífonos de Tom. A partir de ahí, Morrissey y compañía volvieron a ser una obsesión para toda una generación clavada con Tumblr. El efecto fue tan fuerte que reeditó el legado de la banda en la cultura pop moderna.
The Bear
No cabe la menor duda que The Bear, además de darnos un drama culinario brutal lleno de intensidad emocional y autenticidad, también nos ha atrapado por completo gracias a su impecable selección musical. Uno de nuestros puntos favoritos de esta serie.
Cada episodio nos ha permitido recordar o conocer rolas no tan sonadas de bandas y artistas geniales, como David Bowie, The Rolling Stones, Nine Inch Nails, Eddie Vedder, Cocteau Twins, Brian Eno & John Cale, Weezer, Beastie Boys, Kool & The Gang, Stevie Nicks, Talking Heads, Mavis Staples, AC/DC, Pixies, Pearl Jam, Brian Wilson,
En la segunda temporada de The Bear, el uso de “Strange Currencies” de R.E.M. en un momento emocional profundo provocó que incluso la banda le entrara a esta producción, incluso también sonó “Love Story (Taylor’s Version)” con una carga irónica y poderosa–. El soundtrack actúa como un narrador alterno en la serie.
The Sopranos
Antes de que los soundtracks se volvieran cool otra vez, The Sopranos ya usaba canciones de los 60, 70 y 80 como parte integral de su narrativa. Esta producción fue un antes y después en la historia de la televisión, revolucionó lo que se podía hacer en los proyectos para la pantalla chica y la música, fue uno de los aspectos en los que revolucionaron.
Con rolas de Bob Dylan, The Kinks, The Rolling Stones, Pink Floyd, Cream, Bruce Springsteen, Elvis Costello, Los Lobos, Mazzy Star, Eurythmics, Radiohead, Aphex Twin, Moby, la serie no solo mostraba buen gusto, sino una curaduría que elevaba los estados de ánimo de los personajes.
Prueba de esto es la aparición de “Don’t Stop Believin’” de Journey en la última escena de The Sopranos, que se volvió un momento icónico en la historia de la televisión, dando nueva vida a una rola que desde entonces ha sido usada en cientos de comerciales, bodas, karaokes e incluso otros programas de televisión.
Forrest Gump
Estamos seguros que muchos aman a Forrest Gump. Además de contar con un protagonista entrañable, esta icónica película protagonizada por Tom Hanks también es recordada por su espectacular soundtrack, el cual bajita la mano repasa más de tres décadas de historia musical estadounidense.
Desde Elvis Presley, Joan Baez, The Beach Boys, The Mamas & The Papas, The Doors hasta Buffalo Springfield, Aretha Franklin, Jefferson Airplane yThe Byrds, Lynyrd Skynyrd, cada canción dentro de la cinta narra una época en la vida del querido Forrest.
El éxito de Forrest Gump no solo catapultó a sus elenco, también llevó a las nuevas audiencias a canciones como “Fortunate Son” de Creedence Clearwater Revival o “Mrs. Robinson” de Simon & Garfunkel. El álbum de la película vendió millones de copias y se convirtió en una puerta de entrada a la música de los 50, 60 y 70.
Almost Famous
Almost Famous es una película obligada si te consideras un verdadero melómano. Aunque más allá de ser un enorme tributo al rock de los 70, esta cinta no hubiera sido lo mismo sin un soundtrack muy bien armado para representar esta época en la historia de la música.
Con temazos de Led Zeppelin, Elton John, Simon & Garfunkel, Lynyrd Skynyrd,
The Who, Yes, Rod Stewart, The Beach Boys, Nancy Wilson y más, la música no solo nos ayuda a tener un contexto del momento histórico en el que está la historia, sino que de alguna manera, también se siente como el coprotagonista junto al joven William Miller.
Esto es más evidente en la escena del autobús, donde suena “Tiny Dancer” de Elton John, pues es puro cine emotivo. Tras el estreno de Almost Famous, muchas de estas canciones volvieron a los oídos de nuevas generaciones, y el rock setentero vivió un pequeño revival gracias a esta película tan cool.
High Fidelity
Y ya que hablamos de películas obligadas para cualquier fan de la música, no podíamos olvidarnos de High Fidelity. Basada en la novela de Nick Hornby, esta cinta se centra en Rob Gordon, un amante de los vinilos que revive sus relaciones fallidas.
Así que como verán, el soundtrack es muy importante, pues sin esta colección de rolas no tiene sentido la trama principal. Con John Cusack como protagonista, la historia se entrelaza con una serie de clásicos e himnos que celebra a géneros que van desde el rock independiente, el soul, el punk y el pop clásico.
Gracias a temones de The Velvet Underground, Love, Stevie Wonder, Belle and Sebastian, Rush, The Chemical Brothers, Al Green, Joan Jett & the Blackhearts y The Vaselines, muchos jóvenes redescubrieron sonidos crudos y atemporales. High Fidelity no solo impulsó las ventas de vinilos en tiendas indie durante su época, también sedujo a una nueva generación de melómanos.
The Perks of Being a Wallflower
Seguimos con las producciones inspiradas en libros que nos recordaron música grandiosa. Ahora toca el turno de The Perks of Being a Wallflower, basada en la novela de Stephen Chbosky. Esta película retrata la vida de un adolescente introvertido en los 90, y lo hace con un soundtrack profundamente emocional que te llega directito al corazón.
Canciones de David Bowie, The Smiths, New Order, Dexys Midnight Runners, Sonic Youth, Cocteau Twins y más, acompañan el camino de Charlie hacia la madurez. Cada una de estas rolas lo sigue y representa en diferentes situaciones que debe confrontar. Y como dicen por ahí, las penas con música son mejores, ¿no?
La inclusión de “Heroes” de Bowie en la escena del túnel revivió el clásico de 1977 con fuerza entre las nuevas generaciones, mientras que “Asleep” de The Smiths provocó una ola de interés por la discografía más melancólica de la banda. The Perks of Being a Wallflower se volvió una puerta de entrada a la música alternativa ochentera.
Cruel Intentions
Por último pero no menos importante, debemos mencionar a Cruel Intentions. Esta película no solo nos dio un drama adolescente impactante y grandes actuaciones de Sarah Michelle Gellar, Ryan Phillippe, Reese Witherspoon y Selma Blair, también nos regaló una colección de rolas que musicalizaron a la perfección tanto el tono oscuro de la cinta como los diálogos cargados de veneno.
El soundtrack –repleto de puros clásicos de los 90– sirvió como hilo conductor emocional dentro de la cinta. Con canciones de Blur, Fatboy Slim, Placebo, The Cardigans, Faithless e incluso Counting Crows, lograron capturar a la perfección el erotismo, la manipulación y la vulnerabilidad de sus personajes principales.
Sin duda, uno de los momentos más icónicas de Cruel Intentions es su escena final, con “Bittersweet Symphony” de The Verve de fondo, una canción que se convirtió en sinónimo del desenlace de la película y que vivió un nuevo auge gracias a su inclusión. Esta película dio pie a que en los 2000, muchos jovenes redescubrieran toda esta música y se enamoraran de los sonidos de esa década.