Cuando los artistas británicos cobraron relevancia a nivel internacional a mediados de los 90, las corrientes musicales se movieron por dos vertientes.
Por un lado estaban las bandas de britpop que mantenían vigente el rock de guitarra. Estamos hablando de grupos como Pulp, Oasis, Blur, Suede, The Stone Roses, cuyo atractivo era más inmediato… Y por el otro lado podíamos encontrar a los que se enfocaban en la exploración de la convergencia entre la música electrónica y el pop; proyectos como Massive Attack, The Prodigy, Basement Jaxx, The Chemical Brothers y Underworld… entre muchos otros.
Por supuesto, estamos generalizando porque -si nos sentamos a analizar- el big beat de los Chemical Brothers no tiene mucho en común con el hardcore de The Prodigy, por ejemplo. Incluso se podría argumentar que las temáticas que manejaba Underworld eran más afines a las preocupaciones e intereses de Brett Anderson o de Jarvis Cocker de Pulp.
Cuando la gente piensa en electronica, existe el prejuicio de un DJ jugando con una laptop, o los robots de Kraftwerk haciendo ruidos con sus calculadoras. Esa música es “fría”, “distante”, y el adjetivo más injusto que hemos visto, “inorgánica”. Es difícil imaginar a un líder que tome control del escenario al frente de un grupo de techno o de house. Pero por eso Underworld no es una banda cualquiera. El proyecto integrado por Karl Hyde y Rick Smith trasciende los estereotipos y su actitud transgresora lo distingue de proyectos similares como Erasure o Pet Shop Boys.
¿A qué actitud nos referimos? Bueno… ¿te acuerdas del personaje de Mark Renton? Ewan McGregor interpreta a Renton en “Trainspotting”, pero Karl Hyde la da vida a esa energía y exuberancia. Eso no quiere decir que Hyde sea un junkie, sino que personifica el carisma que vuelve aquel personaje ficticio tan atractivo y en la entrevista telefónica hasta contagió a este redactor con su buen humor.
Sopitas.com tuvo el enorme privilegio de entrevistar a Karl Hyde para que nos platicara sobre su proyecto solista, sus fechas en México y, por supuesto, “Trainspotting 2”. Underworld se va a presentar el viernes, 15 de marzo en el escenario Indio del Vive Latino a las 22:30 horas. También ofrecerá un concierto el domingo, 17 de marzo en El Plaza Condesa. Boletos para la segunda fecha en taquilla y por Ticketmaster.
“Creo que es la primera vez en nuestra historia que hacemos eso. Nunca lo habíamos hecho en ningún otro lado.” Hyde se refiere a las dos fechas de Underworld en la Ciudad de México, primero en un festival y dos días después en solitario. “Son dos experiencias distintas. La energía que se desprende de la audiencia es muy diferente. Por supuesto, cuando te presentas en un festival puedes acercarte a un público más diverso pero el gig te permite soltarte ya que estás tocando para tus fans.”
Hyde dice estar muy emocionado de regresar a nuestro país tras cinco años de ausencia y se lamenta por no visitarnos con más frecuencia. También le da una excusa para salir del clima helado de Londres. Le preguntamos si era extraño para una propuesta electronica como la suya tocar en un festival de rock latino. “¡No! De hecho, en nuestros primeros años nos tocaba estar en festivales donde había bandas como Metallica o SlipKnot. Es una emoción distinta porque la gente reacciona diferente, pero al mismo tiempo nos gusta mucho tocar para gente con gustos diferentes. La vibra que emite el público hace que te adaptes.”
SOPITAS.COM: ¿Antes de que fueras contactado para participar en el Vive Latino, estabas familiarizado con algunas bandas de rock en español?
HYDE: No muchas. Espero que eso cambie. Esa es una razón para ir a los festivales. A mi me gusta hablarle a los asistentes y preguntarles ¿Qué estás escuchando ahora? Así puedo tener una mejor idea de todo lo nuevo que está conectando con la gente.
Una elemento en común que siempre resalta en las entrevistas que realizamos con artistas de este calibre puede ser la clave que a tantos otros se les escapa:
Pasión.
La palabra a veces es pronunciada por el artista entrevistado pero siempre se percibe en el tono de su voz. Karl Hyde no es la excepción:
“Nuestro trabajo es hacer que todo mundo se prenda. Nosotros queremos transmitir al público nuestro amor por la música. La pasión deja que te la pases bien. La música es para celebrar. Los festivales son lugares para celebrar.”
¿Qué motiva a un artista como Karl Hyde que ha estado involucrado en la industria con su compañero Rick Smith desde los 80? ¿Cómo le hace para correr a estas alturas del juego?
“Eso es muy interesante. Las letras [de Underworld] hablan sobre cosas de mi propia vida, cosas que realmente me ocurrieron en los días oscuros de mi pasado. Cuando salgo ahora y canto esas canciones, lo hago con alegría. Realmente estoy agradecido de que siga con vida.”
Hyde menciona que es fácil para él caer en una zona de confort con Underworld porque todo le resulta tan familiar. “He trabajado con Rick [Smith] por 34 años. Me encanta tocar con él. Yo espero que nunca me separe de él.” Sin embargo, actualmente Hyde se encuentra promoviendo su debut como solista con el álbum Edgeland, producido por Leo Abrahams. De hecho, su visita a México es la única fecha de Underworld en todo el 2013. Un par de semanas después del VL13, Hyde emprenderá una gira mundial en apoyo de Edgeland, disponible a partir del 22 de abril. Así que hay razón para sentirnos especial.
“Necesito concentrarme en mi propio trabajo para que me dé el aire fresco. Necesito tener un reto delante de mi para que pueda ofrecer un nuevo punto de vista.” Pero quiere dejar algo muy claro: “Yo no quiero que Underworld jamás termine.”
Para Karl Hyde, el proceso creativo detrás de Edgeland fue cubierto por una capa de nostalgia. “Me recordó mucho a los primeros días cuando Rick and I llegábamos al estudio y simplemente improvisábamos. Después de un rato de tocar, grabábamos lo que fuera rescatable. Extraño esos años y sentí que quería volver a tener esa experiencia.”
Underworld tiene muchos momentos en su trayectoria que valen la pena recordar, pero su verdadera marca en la historia del pop la hizo con dos discos que son esenciales: Dubnobasswithmyheadman de 1993 y Second Toughest in the Infants de 1996. Entre estos dos discos salió el sencillo “Born Slippy” con el lado B “Born Slippy .NUXX”. Aunque el sencillo no capturó de inmediato la atención del público, un año después, la inclusión del lado B en la última escena de “Trainspotting” fue suficiente para que la banda se catapultara a la fama.
Estos días están circulando varios rumores de que el director Danny Boyle quiere dirigir una secuela de la película basada en la novela de Irvine Welsh. La popularidad de Underworld fuera de su techno-niche se debe en parte a la banda sonora de la cinta original. “Esa película y su música pertenecen a un periodo en particular.” Al preguntarle si el soundtrack del segundo filme pudiera tener el mismo impacto del primero, Hyde se mostró optimista.
“Si Danny está involucrado [en la secuela] entonces es cosa segura de que la música será una parte importante de la producción del filme.” La última vez que Underworld y Danny Boyle trabajaron juntos fue en la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de Londres hace apenas un año.
“Mega mega white thing.”