Dicen por ahí que llega un punto en el que toda banda tiene que tomar una decisión importante: evolucionar su sonido y crecer como músicos, o de plano continuar como están y estancarse creativamente. En ambos casos hay historias de éxito y que de plano no pegaron; pero en particular, con Twenty One Pilots pasa algo muy curioso pues, en cada uno de sus discos parece que nos muestran una faceta nueva, emocionante e interesante.
Han pasado casi tres años desde que Tyler Joseph y Josh Dun estrenaron su quinto álbum de estudio, Trench. Un disco en el que el dúo dio rienda suelta al enorme talento que tienen. Sin embargo, y tras la gira de promoción, este par decidió darse un descanso para pasar más tiempo con sus seres queridos. Pero bajita la mano no pararon de componer y de repente llegó la pandemia, algo que no impidió que siguieran creando pero que dificultó el proceso.
Twenty One Pilots inicia una nueva era con ‘Scaled and Icy’
Durante el caótico 2020, Twenty One Pilots nos presentaron un par de sencillos. “Level of Concern” y el video interminable que lanzaron y una rola navideña, “Christmas Saves The Year”. Finalmente y tras mucha espera por parte de sus fans, a inicios de abril de 2021 anunciaron con bombo y platillo que este año lanzarían su nuevo material discográfico, el cual lleva por nombre Scaled and Icy y que desde un inicio nos dejó un buen sabor de boca.
De este album tuvimos chance de escuchar tres canciones previas al lanzamiento, “Shy Away”, “Choker” y “Saturday”. Pero la verdad es que no esperábamos lo que este par nos presentó, pues a lo largo de casi 40 minutos nos llevan por un trip musical donde demuestran el enorme crecimiento que han tenido durante todo este tiempo. De cualquier manera si quieren conocer más detalles de este disco, les dejamos la plática que tuvimos con Tyler
El disco arranca de forma enérgica
“Good Day” abre el nuevo disco de Twenty One Pilots, una rola que como su nombre indica, es ideal para iniciar tu día. Se trata de un tema que arranca con un sintetizador engañoso pero conforme avanzan los segundos nos presenta una melodía alegre donde la voz de Tyler se luce por completo con un piano brillante y un ukelele que suena discretamente pero que le da un toque enérgico. Sin duda, es una grata sorpresa para arrancar.
El ánimo sube un poco cuando suenan los primeros sintes de “Choker”, que inicia un tanto tímida aunque mientras pasan los primeros versos nos podemos dar cuenta de cómo han crecido este par en cuanto a la programación de instrumentos electrónicos, además hay que hacer mención especial al mini rap del final. Esta es una canción que sin duda –cuando puedan dar conciertos y regresar a México– será el momento en que todos cantaran con la banda.
“Shy Away” nos muestra una faceta más synth pop de Twenty One Pilots, con esos teclados que nos llevan directito a los 80; claro, con el toque de este dúo. A pesar de contar con una batería sintetizada, hay que resaltar el trabajo que hizo Josh detrás del bombo y Tyler como productor, pues más allá de presentar una base “sencilla”, tiene ciertos momentos de crudeza que suena espectaculares. Una de esas rolas donde simplemente quieres bailar.
Un sintetizador juguetón da la bienvenida a “The Outside”, un tema sumamente minimalista al que le imprimen un toque de funk. Sin embargo, las cosas cambian cuando Joseph tira unas rimas casi a la mitad y cerca del final que te vuelan la cabeza, todo esto acompañado de una línea de bajo sólida y riffs de guitarra con wah que se te pegan en la mente. Quizá este sea el tema más “experimental” de Scaled and Icy, pero que no desentona con el tracklist.
Tyler y Josh no bajan la intensidad
Sin duda “Saturday” nos recuerda irremediablemente a los planes de diversión de los fines de semana antes de la pandemia. Las líneas melódicas de Tyler son espectaculares, dignas de cualquier hitazo pop que simplemente está pensado para romper las radios de todo el mundo. Siendo honestos, no hay mucho qué decir, es una rola en donde Twenty One Pilots nos invita simplemente a dejarnos llevar y disfrutar de su música.
Los beats no paran, pues “Never Take It” también tiene un montón de buena vibra, pues es una pista donde la percusión (tanto electrónica como natural) suenan brillantes junto a las armonías vocales. A esto hay que sumarle el piano que suena constantemente y que nos transmite la sensación de que la rola subirá de intensidad. Y sí, es una verdadera montaña rusa musical, con momentos calmados y otros donde simplemente quieres mover la cabeza a su ritmo.
De un momento a otro, todo cambia…
Para cuando llegamos a “Mullberry Street” nos topamos con la versión más pop de Twenty One Pilots; pero ojo, que eso no es para nada malo. De hecho y por más loco que parezca, suena como si el sonido de Tyler Joseph y Josh Dun se hubieran fusionado con una versión moderna de Elton John. Una melodía alegre y donde las líneas de piano se escuchan simplemente hermosas. Hay que prestarle mucha atención, porque hay detalles en la producción muy interesantes.
Las cosas se van hacia otra lado en el momento en que entra la guitarra de “Formidable”, una canción que le tira más al indie rock con un base típica de liras, bajo y batería. El riff fusionado con un chorus vintage le dan un poco de melancolía mientras hablan sobre un amor un tanto complicado, pues el protagonista se quiere entregar y seguir a esa persona, pero al mismo tiempo está presente el miedo a romperle el corazón y salir lastimado.
“Bounce Man” es otra de las rolas donde podemos darnos cuenta de que Twenty One Pilots querían hacer un disco que nos levantara el ánimo. Además de todo esto, se puede notar de que simplemente deseaban componer rolas divertidas y con líneas pegajosas para repetir en tu cabeza todo el santo día. Y ojo, porque por ahí en el coro –con su línea melódica que no pararás de tararear– hay una referencia muy cool a México que sin duda los fans amarán.
Nos acercamos a la recta final y el ritmo cambia de una canción a otra con “No Chances”. Este es el tema más parecido a lo que el dúo ha hecho en los últimos años, con un sintetizador sombrío que da pie a una extraña mezcla entre balada y hip-hop donde la voz de Tyler suena llena de nostalgia. Aunque para los últimos segundos nos entregan un momento frenético, con unos beats inquietantes y cantos gregorianos, una combinación que te erizará la piel.
Twenty One Pilots seguirá en constante evolución
Todo este viaje termina con “Redecorate”, que nos da cierta tranquilidad después del track anterior. A través de teclados electrónicas crean una misteriosa melodía que nos va atrapando conforme avanza y a la que le van agregando unas percusiones sutiles pero precisas. Son cuatro minutos donde este par nos demuestra la capacidad que tienen para crear capas de sonido concisas. Un cierre digno e inquietante para este material discográfico.
Con Scaled and Icy, Twenty One Pilots hace una declaración evidente: no están dispuestos a conformarse como músicos y artistas. Se nota que se atrevieron a explorar otras cosas y en algunos momentos lo lograron de maravilla, pero otros como que les faltó cierta coherencia. De cualquier manera, es excelente verlos crecer y saber que en el futuro, seguirán evolucionando para entregarnos canciones donde se reten a sí mismos.
Tracklist
1.- “Good Day”
2.- “Choker”
3.- “Shy Away”
4.- “The Outside”
5.- “Saturday”
6.- “Never Take It”
7.- “Mullberry Street”
8.- “Formidable”
9.- “Bounce Man”
10.- “No Chances”
11.- “Redecorate”