Hace un año, Muse entró al estudio mientras la Eurozona colapsaba; el resultado fue The 2nd Law, un álbum inspirado en la segunda ley de la termodinámica, que dicta que todo sistema está destinado a colapsar.
El trío más famoso de Devon presenta su último disco con “Supremacy”, un track cinematográfico con lo mejor de la banda: arreglos de cuerdas, guitarras impresionantes y el juego eterno entre Chris Wolstenholme y Dom Howard, que logra explotar para después recibir a “Madness”, el último sencillo del trío, que mezcla un ligero wah wah wah, con el fraseo de Bono y el espíritu de la Antique Cherry de Brian May en casi 5 minutos que retratan la locura post-relación sentimental y que preceden a “Panic Station”, una oda a Prince y a los ochenta vía ¡¿Sobredosis de T.V?!
En esta ocasión, David Gamble fue el encargado de traducir las ideas de Matt Bellamy en arreglos para orquesta, que tienen su primera gran aparición en “Prelude”, una introducción que se encarga de contextualizar a “Survival”, la odiada canción de los Olímpicos, que toma un nuevo aire en The 2nd Law y sí, suena mejor dentro del mundo cuasi apocalíptico de Muse, mismo que también permite la existencia de la dubstepera “Follow Me”, producida por Nero y dedicada a Bing Bellamy, el hijo de Matt.
En este nuevo cosmos, también hay espacio para el sonido clásico de Muse. Los fans de antaño amarán el riff de “Animals” y podrán notar el parecido entre las guitarras de “Big Freeze” con las de “Map of the Problematique” y la similitud entre las melodías de “Explorers” y la inolvidable “Invincible”. Ta vez lo más novedoso en este último serengeti sonoro del trío de Teignmouth es la incursión de Chris Wolstenholme en las vocales; el bajista –atormentado por sus graves problemas etílicos- escribió “Save Me”, un viaje de ensueño entre guitarras que contrasta con “Liquid State”, una de esas canciones hechas para jammear en el Guitar Hero (Q.E.P.D.).
Una risa nerviosa me acompaña al recordar la parte instrumental de The 2nd Law. A diferencia de la trilogía de “Exogenesis”, “Unsustainable” y “Isolated System” se sienten bastante honestas; estoy seguro de que la primera se convertirá en una de las favoritas en directo por su estructura dubstep y la segunda, podría ser -con su progresión de piano- una de las composiciones más bellas y balanceadas de Matt Bellamy.
Con todo el hype apocalíptico de los últimos meses, uno esperaría encontrar una segunda de parte de Absolution en The 2nd Law, esto no es así. El sexto largo de Muse está más conectado con los problemas del corazón que con los políticos y afortunada, o desafortunadamente, presenta una colección de diferentes sonidos, influencias, experimentos y tiempos que hacen que The 2nd Law parezca más un Greatest Hits que un disco con un concepto (tan grande como el de la segunda ley de la termodinámica) de respaldo. Esto no es malo, de hecho podemos esperar la más espectacular gira de Muse en breve; la banda apenas demostró qué tan bien suenan los nuevos hits en el último iTunes Festival.
Homero homero@sopitas.com
No se pierdan nuestra entrevista exclusiva con Dom Howard y Matt Bellamy de Muse; pueden escuchar The 2nd Law en su totalidad dando click aquí.