Muchas cosas ocurrieron este 24 de octubre. Y es que desde que Gorillaz (cuya reseña puedes leer aquí) anunció que vendría a México, la gente no podía dejar de contar los días para que un concierto de ellos solos se llevara a cabo. De ahí fue que cuando finalmente el día llegó, la gente tuvo uno de los mejores momentos pues, de principio a fin se mostró entregada. 

Por su parte, Damon y el resto del colectivo igualmente se dejaron llevar en cada una de las canciones. Un claro ejemplo fue De La Soul, quien cantó en “Superfast Jellyfish”, pero ya entrada un poco más la noche, les preguntó a los mexicanos si podía “unírseles a la fiesta”. ¿La respuesta? Un eufórico “sí”. De ahí fue que comenzó a cantar “Feel Good Inc.” y posteriormente, más y más canciones llegaron a nuestros oídos que jamás se cansarán de escuchar la voz de Damon, su melódica o a los impresionantes músicos, cantantes y coristas que en ciertos momentos tuvieron su protagonismo dentro del show. 

Otra cosa que también es importante destacar, más allá de que con este concierto Gorillaz cerró su gira mundial, es el hecho de que Damon realmente no lo sintió como un trabajo, sino que en cada momento —su cara misma lo delataba— disfrutaba de lo que ocurría ante sus ojos, de sus propios músicos —los veía como si fuera un papá orgulloso de sus hijos—, y sobre todo, estaba muy agradecido.

Al final del concierto, en uno de los momentos más emotivos de la noche, Damon dejó en claro que durante dos años todos y cada uno de ellos fueron su familia. Que emprendían el camino para su tour y descubrían nuevas cosas. A través de su cuenta de Instagram los fans también lo descubrieron y anoche, una vez más, esta red social ejemplificó claramente a lo que Damon se refería. 

Tal vez los que estuvieron en el concierto hayan presenciado y grabado lo más que pudieron, pero detrás de bambalinas, antes y después del show, hubo mucha acción, movimiento, reacciones y agradecimientos que ahora nos muestran la otra cara, lo que nadie vio, lo que nadie contó y que hoy, gracias a la tecnología e internet, se quedará en la posteridad. 

En las propias palabras de Damon Albarn, el concierto que dio Gorillaz en el Palacio de los Deportes este 24 de octubre fue el último en mucho tiempo. Cabe recordar que después de haber lanzado Plastic Beach y The Fall en 2010, Gorillaz se mantuvo alejado de la música durante siete años. Así que en dado caso de que las palabras de Albarn sean ciertas, posiblemente transcurra el mismo tiempo de espera. 

Con esto solo podemos decir: Enjoy!

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