Si hay una banda que dictó las reglas del synthpop y el Hi-NRG durante toda la década de los 80, esa fue Dead Or Alive, una banda que se formó en el Liverpool de 1980 con el líder y vocalista Pete Burns y, posteriormente, el multiinstrumentista, Steve Coy, el cual falleció este fin de semana. Burns se encargó durante cuatro años, de darle un espacio a esta banda con un estilo andrógino que cautivó e influenció a otras figuras de la década como Boy George de Culture Club.
Fue hasta 1984 que Dead Or Alive se convirtió en la banda que todos recordamos hasta la fecha, año en que se unió Steve Coy como baterista –aunque también sirvió de guitarrista y tecladista– y salió el primer y más grande éxito: el cover “That’s the way (I Like It)” de la banda disco KC & The Sunshine Band. Después de esta canción, llegaron otros más que los catapultaron en el lugar que tienen ahora como “You Spin Me Round (Like A Record)”, “In Too Deep”, “Brand New Lover”, “My Heart Goes Bang”, “Lover Come Back To Me” y más.
Después de nueve años de muchos éxitos y Mad, Bad and Dangerous, un penúltimo disco en 1987 que resultó todo un fracaso, dos miembros de Dead Or Alive se separaron, pero Burns y Coy siempre permanecieron juntos hasta la muerte del vocalista en octubre de 2016. Ahora, con la muerte de Coy, comienza un nuevo legado de la banda que, como mencionamos, logró hacer de Hi-NRG, un género predominante durante los 80 y principios de los 90.
Quizá Dead Or Alive permanezca más en la mente de las personas gracias a la imagen de Burns y su voz –sin duda, una de las mejores de la industria–; sin embargo, Coy siempre fue la segunda mitad de la banda que con cuatro discos de estudio, el último lanzado hace casi 30 años, logró convertirse en la imagen de toda una era en la música que hasta la fecha, sigue influenciando algunas bandas y géneros musicales.