Corona Capital 2021 está a la vuelta de la esquina y nos emociona que luego de los complicados momentos del último año, por fin volveremos a vibrar con la música en vivo. Por ello es que acá en Sopitas.com, estamos recordando algunos de los mejores momentos y presentaciones en la historia del festival. Ahora, echamos una vuelta breve pero entrañable al show de Kings Of Leon en la edición de hace siete años.
Era el CC2014 y tuvieron que pasar 5 años para que la banda de Nashville, Tennesse, integrada por los hermanos Followill –y su primo– regresara a nuestro país. Con su último disco, Mechanical Bull, la banda había pasado ya un año de gira por diferentes ciudades y decidieron cerrar en nuestra ciudad. Al contrario del sábado, el domingo a la hora que salieron los Kings Of Leon, el escenario Corona y todo hasta donde alcanzaba la vista estaba lleno. Para muchos, la elección no era fácil, pues a la misma hora tocaba Lykke Li, pero para muchos otros, no había nada qué pensar.
Con los movimientos de horarios post-lluvia, ya uno no sabía ni a qué hora estar listo y Kings of Leon salió con algunos minutos de adelanto. Su setlist estuvo enfocado durante la primera parte a Mechanical Bull, pero todo cambió de tono cuando comenzaron a intensificar su viaje perspectivo, comenzando por “Knocked Up”, fue a partir de ese punto que los Kings cambiaron el tono del concierto, pasando incluso por canciones no tan viejas como “Pyro” o “Radioactive” de Come Around Sundown.
Lo mejor fue guardado para irlo soltando poco a poco hacia el final, con “Notion” y “Use Somebody” que fueron de las más coreadas/gritadas, sin importar los que estaban emigrando al Bizco Club… o a la puerta de salida, todos se detenían a corearlas. KoL salió del escenario tranquilamente, por lo que era evidente que regresarían para dar un poco más. Sólo pasaron unos pocos minutos antes de que la banda regresara al escenario para regalarnos tres canciones más: “Crawl”, “Black Thumbnail” y desde luego, “Sex on Fire”, complementada perfectamente con una lluvia de fuegos artificiales.
Han pasado casi 20 años desde que Kings of Leon lanzó su primer disco y se han transformado de una forma, digamos, interesante al menos en cuanto a imagen. Si bien le han sido fieles a su sonido sin tener grandes evoluciones salvo quitarle la “mugre” a su look y a su música, siempre es grato reencontrarse con lo que hay debajo de todo el brillo del que se han rodeado: su sonido rasposo, mugroso y clásico. Kings of Leon demostró que en el fondo siguen siendo rockeros barbones con jeans enlodados… como todos los que quedábamos anoche en el festival escuchándolos.
Aquí hay más fotos de su presentación:
Fotos: Diego Figueroa
Texto: @conejoazulorama