El chisme es algo que todos amamos –no se hagan–, algo que a muchos nos mantiene vivos, sobre todo si viene de la farándula. 2020 ya nos ha dejado grandes chismes, como el embarazo de Grimes y Elon Musk, sin embargo el que les traemos hoy está en otra categoría, es de proporciones colosales, pues dos personas importantes en el mundo del entretenimiento acaban de anunciar que después de varios años juntos se pusieron a hacer su chamba están esperando a su primer hijo, por supuesto que hablamos de Katy Perry y Orlando Bloom.
Quizá ya sepan toda su historia de amor o de plano no tienen ni idea, como sabemos que quieren conocer cada uno de los detalles, por acá les contaremos a detalle cómo es que la popular cantante y el actor de Hollywood terminaron juntitos. Tenemos que recordar que Katy Perry se casó en octubre de 2010 con el comediante británico, Russell Brand. Aunque se les veía muy felices juntos por todas las alfombras rojas más importantes del mundo, la verdad era otra pues al parecer (y como nos enseñó La La Land) se querían pero cada quien tenía prioridades diferentes.
14 meses de matrimonio después –para ser exactos el 30 de diciembre de 2011–, Brand le pidió el divorcio a Perry alegando diferencias irreconciliables, que más tarde se sabría que el actor quería formar una familia pero la querida Katy decía no estar lista. Russell no lo hizo de la manera más madura posible, pues así como que no queriendo le mandó un mensaje de texto a la estrella del pop para decirle que de plano quería terminar, todo esto mientras ella estaba de gira.
Desde entonces a Katy Perry se le relacionó con el músico John Mayer, pero al final terminó concentrándose en su carrera hasta que fue inevitable no terminar flechada por el actor de Piratas del Caribe.
Por su parte, Orlando Bloom tampoco se salva de las relaciones –como diría la chaviza– tóxicas. En 2007 comenzó a salir con la modelo de Victoria’s Secret, Miranda Kerr, y tras tres años de relación la pareja confirmó en junio de 2010 que estaban comprometidos, un mes más tarde se casarían en Los Ángeles. Tiempo después varios medios publicaron que Bloom y Kerr estaban esperando a su primer hijo y el mero día de reyes de 2011 nació Flynn Christopher Blanchard Bloom (ah, pa’ nombrecito).
Así como su ahora prometida, todo era miel sobre hojuelas pero en realidad ambos no se sentían a gusto estando juntos. El 25 de octubre de 2013 la pareja anunció con un comunicado oficial y toda la cosa, que se divorciaban después de una separación amistosa que duró varios meses. Después de este fracaso amoroso, el querido Legolas se dedicó a grabar películas como The Hobbit: The Battle of the Five Armies y Pirates of the Caribbean: Dead Men Tell No Tales.
Y a todo esto, ¿cómo fue que estas dos estrellas terminaron juntas? Bueno, pues no se sabe muy bien cómo fue el contacto, quizá se mandaron un DM en Instagram o quién sabe, pero la primera vez que se les vio acarameladitos fue en la entrega de los Golden Globes en 2016 cuando las cámaras los captaron echándose miradas coquetas. Aunque nunca confirmaron que estaban saliendo, se les siguió viendo paseando por un montón de lugares, desde Aspen, Colorado hasta el Festival de Cannes.
Así continuaron todo este año hasta que a principios de 2017 comenzó a circular el rumor de que habían terminado. Pero todo cambiaría iniciando el 2018 pues supuestamente Katy había visitado a Orlando en Praga mientras grababa la serie Carnival Row, aunque confirmarían su regreso hasta abril de ese mismo año cuando ambos fueron al Vaticano y la cantante publicó una foto de los dos con el Papa Francisco. Desde entonces han presumido su amor por todos lados hasta que en San Valentín de 2019 decidieron tomar el toro por los cuernos y comprometerse.
Ahora y tras un año de compromiso la pareja hizo oficial con todo el mundo que están embarazados, y por supuesto que lo hicieron con bombo y platillo. Muy a su manera y anunciando el lanzamiento de un nuevo disco, Katy Perry estrenó en la madrugada de este 5 de marzo el video de “Never Worn White”, que en sí dice mucho en pocos minutos pero vamos por partes. La letra de la canción es quizá una de las más personales de toda su carrera, pues en ella la cantante narra todos los miedos y deseos que tiene la cantante a la hora de casarse con Bloom.
Pero más allá de eso en el videoclip dirigido por el duo francés J.A.C.K, nos deja con el ojo cuadrado, pues a pesar de que la vemos vestida con un atuendo extravagante de flores, la atención de todos se centró en una sola cosa. Casi al terminar el visual, una toma deja ver por un montóoooon de tiempo a Katy acariciando su viente y anunciando que después de protagonizar el Super Bowl XLIX en 2015 y de llenar estadios por todo el mundo, por fin estaba lista para ser mamá.
Sin más qué decir y después de conocer TODO el chisme, chequen a continuación el video de “Never Worn White” donde Katy Perry confirmó que está embarazada y esperando a su primer hijo junto a Orlando Bloom: