Por: Raúl Ramírez
Tras el lanzamiento de ‘On The Line’ su cuarto LP, Jenny Lewis regresó a El Plaza como parte de su gira promocional de su último material discográfico.
Fue poco después de las 9 de la noche cuando el venue se quedó completamente oscuro y la gente comenzó a gritar, pues era hora, estábamos por ver Jenny Lewis y compañía en acción. Jenny sin duda logro cautivar a los asistentes con su maravillosa voz y su traje de lentejuelas desde los pocos segundos que tenía en el escenario.
Y ahí estaban, una vez más en tierra mexicana listos para dar un show lleno de magia. Sonaron las primeras notas musicales de “Heads Gonna Roll” aún con las luces apagadas, fue hasta el primer coro de la canción cuando prendieron las luces, para esto ya era demasiado tarde, pues Jenny ya nos había cautivado con su encanto desde el primer verso.
Sonaron “Wasted Youth”, “Head Underwater”, “Happy”, “Voyger”, “Do Si Do” y “She’s Not Me” canción tras canción el show seguía, apenas y le daba tiempo a los asistentes para darle el trago a su cerveza después de aplaudirle. Jenny Lewis puso a todos a bailar al ritmo de lo que nos atreveríamos a llamar soft rock/pop rock con toques de country.
Fue entonces que sonó ”Redbull & Hennessy”, el calentamiento ideal para escuchar “One of the Guys” y “Silver Lining” ésta última, perteneciente a su proyecto alterno llamado Rilo Kiley.
Jenny nos dijo: “Ahora que estamos finalmente solos y en la oscuridad, ¿les importaría aluzarme con los flashes de sus teléfonos para parecer una bola disco humana?” antes de empezar a escuchar “Little White Dove“
Era el momento climax de la noche cuando de la nada comenzaron a flotar globos gigantes de color azul y rosa por todo el recinto hasta que todos terminaron siento parte de la escenografía sumándole aún más color a Jenny y compañía.
Para después hacerlos bailar al ritmo del country con Fernando todos seguían el ritmo con la cabeza, otros hasta imitaban el sonido de la guitarra con las manos como si fueran ellos los que la estaban tocando. Lo que significaba que era el final del set.
Salieron del escenario y la gente no se hizo esperar para empezar a gritar “¡otra!, ¡otra!, ¡otra!” y así fue, a los pocos minutos de haber dejado el escenario Jenny y sus músicos volvieron para cantar “Dogwood”, “Party Clown”, “I Never” para así concluir la increíble velada con “Acid Tongue or Rabbit Fur Coat”
Sin duda una noche muy especial y llena de colores (en la iluminación) que nos hacían sentir en un baile de graduación de secundaria de película cursi.