Aunque la historia del grunge es relativamente breve, las bandas que emergieron en su auge dejaron un enorme legado y una de ellas, por supuesto, es Alice In Chains. El grupo que en su momento encabezó Layne Staley tiene un lugar especial dentro del género y mucho de ello tiene que ver con el excelente trabajo que significó su disco Dirt.
Y sí, lo sabemos: su primer álbum, Facelift, también es espectacular en muchos niveles. Pero en términos generales, es su segundo material el que mejor rendimiento otorgó. Y en todo caso, es el que impulsó su carrera como una de las agrupaciones más llamativas dentro del llamado “sonido de Seattle”, esto gracias a canciones de la talla de “Would?”, “Rain When I Die” y “Down In A Hole”, que nos mostraban el lado más áspero y melancólico de dicho estilo musical.
Sin embargo, de esa maravillosa placa discográfica, otro de los tracks más memorables y destacados es “Rooster”, el cual para muchos es la canción definitiva de aquella producción. Este tema alberga una interesante y emotiva anécdota familiar detrás de la poderosa guitarra de Jerry Cantrell y ahora, en esta sección a la que llamamos la Historia detrás de la canción, queremos recordarla.
La etapa de Alice In Chains y ‘Dirt’
Alice In Chains ya tenía un recorrido importante en la escena local de Seattle antes de lanzar Dirt. Para 1990, el grupo había lanzado Facelift, un disco que atrajo las miradas de la gente con rolas como “Man In The Box” (un clásico total) y “We Die Young”. Es justo decir que esa producción aún no los introducía en la estela del grunge pues, primero que nada, este estilo vio su boom en los años siguientes al debut discográfico de la banda, además de que ellos estaban identificados entre el público como una extraña agrupación de hard rock/heavy metal.
Llegó entonces el 29 de septiembre 1992 y con esa fecha, el lanzamiento de Dirt. Y la banda de hecho no abandonó mucho la raíz metalera de la que venía, pero la atenuó con una producción más pulcra, canciones más densas tanto en composición como en lírica, con temáticas diversas e influenciada por uno que otro trágico acontecimiento.
Tal como lo recuerda Jerry Cantrell en una entrevista para Vice, una parte de este disco lo grabaron en un estudio en Los Ángeles precisamente en marzo de 1992. Ahí, les tocó vivir en carne propia -por decirlo de alguna manera- los disturbios y las protestas que diversas comunidades llevaron a cabo luego de que un juez absolviera de todo cargo a un grupo de policías que había golpeado brutalmente al taxista Rodney King.
“El primer día de grabación, Los Ángeles se hizo pedazos en protesta por la brutalidad policial. Tuvimos que intentar salir de la ciudad sin lastimarnos. Creo que nos llevamos a Tom Araya [de Slayer]con nosotros…”, mencionó el guitarrista en esa entrevista. Dato curioso: el vocalista y bajista de Slayer prestó su voz para hacer coros en el disco. Otro dato curioso: ese mismo incidente en L.A. inspiró a Rage Against The Machine a escribir algunos versos para “Killing In The Name”.
La banda admitió en su momento que aquel denso clima social se impregnó de alguna manera en la oscura temática del álbum. Y eso, es solo un ejemplo de lo pesado y deliciosamente áspero que este material resulta para los fans. La otra anécdota se esconde, por ejemplo, en la magnífica “Rooster”.
La historia detrás de “Rooster”
Dirt es un disco que esconde historias oscuras, complicadas, anécdotas duras de la vida real y este es el caso de “Rooster”, el cuarto sencillo del álbum. Para muchos, esta es la canción ‘diferente’ de Alice In Chains, la que marca una pauta distinta dentro del lúgubre y enérgico paseo sonoro que el material evoca, sin abandonar esa característica densa que es el sello de la casa.
La pista tiene una clara referencia a los horrores, las dificultades, el terror y los problemas de la guerra. Y esa no es una inspiración al azar, De hecho, este track está basado en el padre el guitarrista Jerry Cantrell, quien sirvió en la Guerra de Vietnam como soldado. A Jerry Cantrell Sr le apodaban “Rooster”, según platica el músico en una entrevista con el portal LouderSound de 2006.
Pues resulta que para 1991, Jerry Cantrell se encontraba temporalmente sin hogar, así que se fue a vivir a la casa de Chris Cornell y su entonces esposa Susan Silver, la cual era representante de Alice In Chains en esos días. En ese periodo de introspección, comentó el guitarrista, pensó mucho en el distanciamiento que él y su familia habían tenido tiempo atrás con su padre debido a las secuelas psicológicas que sufrió tras su servicio en la milicia.
“Esa experiencia en Vietnam lo cambió para siempre… y ciertamente tuvo un efecto en nuestra familia, así que supongo que también fue un momento decisivo en mi vida. Él no nos abandonó. Lo dejamos. Era un ambiente que no era bueno para nadie, así que nos fuimos a vivir con mi abuela a Washington, y ahí fue donde asistí a la escuela. No tenía mucho a mi padre cerca, pero comencé a pensar mucho en él durante ese período… Ciertamente yo tenía resentimientos, como cualquier joven en una situación en la que un padre no está presente o una familia está dividida. Pero en Rooster , estaba tratando de pensar en su versión, por lo que podría haber pasado [su padre]”.
En una entrevista más reciente con Gibson TV para su sección Icons, Cantrell dice que esta canción cobró un mayor significado cuando su madre murió y la única figura familiar que le quedó era su padre. Ahí, dice, supo que debía entender todo por lo que su padre había pasado. A continuación, te dejamos esa charla para que la veas (y POR ACÁ, puedes encontrar el fragmento transcrito de la plática).